El pequeño comercio prestó este miércoles 14 de noviembre en Palencia un mayor apoyo a la huelga general frente a anteriores convocatorias, en una jornada que contó con "una gran incidencia" en el sector industrial, principalmente en el sector del automóvil y empresas auxiliares. Además, las dos grandes superficies de la capital palentina, Las Huertas y El Arambol, con cerca de setenta puntos de venta, la mayoría no abrió hoy al público a primera hora.

Con la presencia de piquetes informativos, los trabajadores de esas grandes superficies evitaron incorporarse a sus puestos de trabajo en torno a las nueve de la mañana aunque luego fueron abriendo al mediodía la mayoría como en el caso de Mercadona, Carrefour y otros espacios similares.

Por su parte, la Plaza de Abastos del centro de la capital, apenas contó con puestos abiertos a las ocho de la mañana, y en torno a las once se podía ver un goteo de clientes mínimos en la veintena de establecimientos abiertos sobre un total de 69. En el casco histórico sí permanecieron activos la mayoría de bares y locales de venta de productos de primera necesidad.

En la industria se pararon como en anteriores ocasiones las cadenas en metal y automoción, con menor incidencia en el sector alimentario, si bien fuentes sindicales reconocieron el incremento de apoyos recibidos desde el comercio.

La jornada de huelga se desarrolló en general sin incidentes reseñables salvo abucheos y pitadas a la entrada de algunos centros de trabajo. En cuanto al transporte urbano de la capital se contó con servicios mínimos de un autobús por cada una de las cinco líneas, con paro total salvo mínimos en lo que se refiere al aseo urbano, mientras en ayuda a domicilio también el paro fue absoluto.

Hubo presencia de piquetes a la entrada de la Delegación Territorial de la Junta en Palencia en torno a las ocho de la mañana con bocinas y pitadas a la mayoría de funcionarios que sí decidieron acudir a su puesto de trabajo. En el resto de edificios públicos del Ayuntamiento, y en la Diputación, el seguimiento de la huelga fue también minoritario.

Finalmente, la estación de autobuses de Palencia funcionó con total normalidad desde primera hora de la mañana, aunque con una menor presencia de usuarios de lo habitual. Hasta el mediodía, en torno a una decena de autocares salieron sin ningún tipo de problema hacia sus puntos de destino sin la presencia de piquetes informativos de los sindicatos.

No obstante, algunos de los autocares que partieron de madrugada desde las cocheras situadas en los polígonos industriales de la capital recibieron el lanzamiento muy aislado de huevos y pintura sin mayores consecuencias.