Las firmas 'Riverside' y 'Di de Sant' presentaron sus ideas para la temporada de primavera-verano 2011 con una inspiración étnica que presenta a una mujer femenina, sensual y muy étnica. Tejidos vaporosos, sedas y tules de amplio colorido para demostrar que la mujer puede salir a la calle y demostrar la alegría que desprenden sus ropas.
La colección de 'Riverside' es una colección moderna en la que destacan camisetas que evocan a los años 70 con faldas vaporosas por encima de la rodilla y prendas sueltas que se adaptan a la silueta de la mujer. Tonos vivos en los que predominan los colores tierra, los verdes y los azules que se entremezclan para dar mayor luminosidad a la mujer.
Sedas, tules y algodones son los tejidos que estas artistas de la aguja castellana y leonesa han utilizado, y que se presentan al exterior en bonitos estampados y bordados con volantes por encima de la rodilla. En concreto, una línea fresca y vistosa que combina un modelo urbanita con una línea casual y moderna, digna de la mujer del siglo XXI.
Las playas de Brasil y el ambiente de la sabana llegaron de la mano de 'Di de Sant' que mostró una mujer sensual y muy étnica, inspirada en las mujeres brasileñas y en las prendas del país americano mediante la utilización de las sedas, los brocados y los tules. Tejidos vaporosos extremadamente coloridos que mezcla los tonos de la madre Tierra con los azules de las playas de Ipanema.
El diseñador ha elaborado esta línea en la que se incluyen prendas de baño y vestidos de día, aprovechando un viaje que realizó al país sudamericano en el que pudo empaparse del ambiente cosmopolita de la mujer brasileña. Tocados naturales y faldas estampadas que evocan elementos de la naturaleza y de la vegetación de la selva.
Prendas ceñidas y amplias camisolas para una mujer interracial y tribal que puede lucir estas prendas en las calles de la región por el día y por la noche. Escotes pronunciados, espaldas al aire y hombros al descubierto para dejar ver la belleza de las formas femeninas.
Por último, vestidos por encima de la rodilla con tocados con plumas inspirados en el Carnaval de Río de Janeiro, en un intento por poner en valor una colección comercial y muy colorida, según destacó su creador. Destaca un vestido de gala recto y más formal que los anteriores que cerró un desfile que arrancó los aplausos del público.