José Luis Alonso de Santos (Valladolid, 1942). Licenciado en Ciencias de la Información (Imagen) y Filosofía y Letras (Psicología), cursó estudios teatrales en el Teatro Estudio de Madrid con maestros como Miguel Narros, Maruja López y William Layton, pionero del método Stanislavski en España. Es catedrático de
Escritura Dramática en la Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid.
Su primera experiencia escénica importante es la participación, como actor,
en el montaje de Proceso por la sombra de un burro (1964-1965), de Friedrich
Dürenmatt. A partir de entonces, su vida teatral está ligada a diversos grupos
de teatro independiente, como el TEI o Tábano, donde abundaban la creatividad
y el entusiasmo y escaseaban los medios y el dinero. Pasa después
a dirigir el Teatro Libre de Madrid, en el que participa, a la vez, como actor,
director y autor. A fines de 1975, coincidiendo con los estertores del franquismo,
estrena su primera obra, ¡Viva el Duque, nuestro dueño!. También
en montajes del Teatro Libre se representan sus siguientes obras: Del laberinto
al treinta (1979), El combate de don Carnal y doña Cuaresma (1980),
galardonada con el Teatro Aguilar, y La verdadera y singular historia de la
Princesa y el Dragón (1981). En 1981 estrena en la sala El Gayo Vallecano La estanquera de Vallecas, que constituye su primer gran éxito y donde ya están presentes todas las características inconfundibles que van a definir su teatro:
amenidad, sentido del humor (no exento de una cierta melancolía agridulce),
sensibilidad social, capacidad para comunicarse con el público y un lenguaje
aparentemente nada artificioso, natural, cotidiano. Esta obra, sobre la que
Eloy de la Iglesia dirigió una película, ofrece un retrato de la delincuencia
hecho con humor y sentido social.
En 1984 estrena El álbum familiar. 1985 es un año fundamental en su trayectoria:
su obra Fuera de quicio gana el Premio Rojas Zorrilla y se consagra
con el estreno de Bajarse al moro, el mayor éxito popular y de crítica de toda
su carrera y que, como otras obras del autor, contó con la correspondiente (y
también exitosa) versión cinematográfica. Con ella obtuvo los premios Tirso
de Molina, Nacional de Teatro 1986 y Mayte 1987, entre otros.
En 1987 estrena Fuera de quicio y La última pirueta. En 1988 funda la productora teatral Pentación, con Margarita Piñero, Tato Cabal, Gerardo Malla, Rafael Álvarez “El Brujo” y Jesús Cimarro. Con ella estrena ese mismo año Pares y Nines, que constituye un nuevo éxito. Los títulos se suceden: Trampa para pájaros, estrenada a finales de 1990, Vis a vis en Hawai (1992), Dígaselo con válium, el monólogo La sombra del Tenorio (1995), Yonquis y yanquis (1995), Amados míos (comedia musical escrita para Sara Montiel, 1995) y Salvajes (1997). Sus últimas obras estrenadas son La comedia de Carla y Luisa (2000), Cuadros de amor y humor al fresco (2001), Un hombre de suerte (2002), Yo Claudio (2004) y ¡Viva el teatro! (2006).
Como se deduce de su trayectoria, José Luis Alonso de Santos es un hombre de teatro. En distintas etapas, además de escribirlo, lo ha interpretado, dirigido (unas treinta obras propias y del repertorio clásico), enseñado, organizado representaciones e incluso recorrido, como los cómicos de antaño, la geografía española. Ha realizado la versión de medio centenar de obras de autores como Plauto, Agustín Moreto, Aristófanes, Molière, Shakespeare, Quevedo o Calderón, y ha escrito guiones de cine o series de televisión como Eva y Adán. Sus textos dramáticos revelan una destreza inusual para la tragicomedia en clave costumbrista y con voluntad crítica.
Ha sido director de la Real Escuela Superior de Arte Dramático y, durante cuatro años (2000-2004), director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Es autor de la novela de humor Paisaje desde mi bañera (1993) y del relato juvenil Una de piratas (1994), así como de los ensayos Teatro español de los 80 (en colaboración con Fermín Cabal, 1985), La escritura dramática (1998) y Manual de teoría y práctica teatral (2007).
En 2009 estrena su obra En el oscuro corazón del Bosque.
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OBRAS TEATRALES*
- ¡Viva el Duque, nuestro dueño! (1980). Vox. (1988, junto con La estanquera de Vallecas) (2001). Alhambra.Castalia Didáctica.
- El combate de don Carnal y doña Cuaresma (1980). Aguilar.
- La verdadera y singular historia de la Princesa y el Dragón (1982). Miñón. (1991). Susaeta.
- El álbum familiar (1982). Primer Acto. (1984). Preyson-SGAE. (1992, junto a Bajarse al moro). Espasa-Calpe. Colección Austral.
- La estanquera de Vallecas (1982). La Avispa. (1986). Biblioteca Antonio Machado. (1988, junto con ¡Viva el Duque, nuestro dueño!) Alhambra. (1992). En Teatro español contemporáneo (Antología), Centro de Documentación Teatral. (1995, junto con La sombra del Tenorio). Clásicos Castalia.
- Del laberinto al 30 (1985). En Estreno, vol. XI, núm. 2, Universidad de Cincinnatti, págs. 7-27. (1991, junto con Pares y Nines) Fundamentos.
- Bajarse al moro (1985). Ediciones de Cultura Hispánica del Instituto de Cooperación Iberoamericana. (1986). Ediciones Antonio Machado-SGAE. (1988). Cátedra. (1989). Primer Acto-Girol Books. En Seis dramaturgos españoles del siglo XX. Teatro en Democracia, vol. II. (1992, junto con El álbum familiar) Espasa-Calpe, Colección Austral.
- Fuera de quicio (1985). Ayuntamiento de Toledo. (1988). Ediciones Antonio Machado-SGAE. (1993). Estro.
- La última pirueta (1987). Ediciones Antonio Machado-SGAE. (1994). Universidad de Murcia.
- Carta de amor a Mary (1988). En Art. Teatral (Cuadernos de minipiezas ilustradas), núm. 2. (2000). Everest.
- Pares y Nines, en Primer Acto, núm. 227, enero-marzo 1989, págs. 46-73.
- (1990). Ediciones Antonio Machado-SGAE. (1991, junto con Del laberinto al 30 Fundamentos.).
- Trampa para pájaros (1991). Marsó-Velasco. (1993). Edelvives. (1993). SGAE.
- La chica de los ojos azules y Mujeres de vida fácil (Teatro Breve), Barcarola, núm. 39, Albacete, 1992, pág. 235.
- Agosto (Teatro Breve), Barcarola, núm. 41, Albacete, 1993, pág. 171.
- Lapizlázuli (Teatro Breve), Barcarola, núm. 41, Albacete, 1993, pág. 175. En Maratón de monólogos 2002, Asociación de Autores de Teatro (ATT), Madrid, 2002, págs. 15-18.
- Besos para la bella durmiente (1994). Castilla Ediciones.
- Vis a vis en Hawai (1994). SGAE.
- La sombra del Tenorio, en Primer Acto, núm. 257, 1995. (1996, junto con La estanquera de Vallecas) Clásicos Castalia. (1996). SGAE.
- Hora de visita (1996). SGAE.
- Yonquis y yanquis (1997). SGAE. (2002, junto con Salvajes) Clásicos Castalia.
- Salvajes (1998). SGAE. (2002, junto con Yonquis y yanquis) Clásicos Castalia.
- Dígaselo con válium (2001). Fundación Pedro Muñoz Seca.
- Cuadros de amor y humor al fresco (2001). La Avispa. (2006). Cátedra.
- La comedia de Carla y Luisa (2003). Centro Cultural de la Villa de Madrid y Fundación Autor (SGAE).
- El Romano (2003). Ediciones Irreverentes.
- Una pequeña confusión (2003). En Maratón de Monólogos,
- Asociación de Autores de Teatro (AAT), 2003, págs. 19-22.
- De mayor seré bomba (2003). En Teatro contra la guerra, Asociación de Autores de Teatro (AAT), págs. 13-14.
- Un hombre de suerte (2004). Editorial Ñaque.
- Yo Claudio (2006). Editorial Ñaque.
- ¡Viva el teatro! (2006). Editorial Everest.
- En el oscuro corazón del bosque (2008)
* Se indican las fechas de publicación del texto, no las del estreno de la obra.
NARRATIVA
- Paisaje desde mi bañera (1993). Espasa-Calpe.
- Una de piratas (1994). S.M. Colección El Barco de Vapor.
OBRAS TEÓRICAS
- Junto con Fermín Cabal: Teatro español de los 80 (1985). Fundamentos.
- La escritura dramática (1998). Castalia.
- Manual de teoría y práctica teatral (2007). Castalia.
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ACTO PRIMERO
ESCENA PRIMERA
(Habitación destartalada en una calle céntrica del Madrid antiguo. Pósters por las paredes y un colchón en el suelo cubierto de almohadones. Sobre una mesa, revistas pop, como Víbora, Tótem, y otras. En un rincón, una señal de tráfico, y en el otro, una jardinera municipal. Sobre ella, una jaula con un hámster. En el centro, una mesita con aire moruno y unos sillones de mimbre de antes de la guerra. Además hay tiestos y otros cachivaches inesperados, como una cabeza de esclavo egipcio con una gorra puesta, y cosas por el estilo encontradas en el Rastro. A la derecha, formando un recodo, se ve la puerta que da a las escaleras de salida a la calle. A la izquierda, una ventana por la que entran los ruidos de la ciudad. Y al fondo, una cocinilla, una puerta que da al lavabo, y otra que da a un cuarto pequeño. Por las paredes anda una flauta, un mantón de Manila, unos bafles que no suenan, un armario, una colección de llaves, la cara de Lennon, el espejo de la Cenicienta y un horóscopo chino. Y sin embargo, a pesar del aparente desorden, hay algo acogedor, relajante y bueno para los que están de los nervios; porque es un lugar tranquilo y pacífico donde el caos que uno lleva dentro se encuentra lógico y con ganas de tomar asiento. Al comenzar nuestra historia, en escena está JAIMITO, un muchacho delgaducho de edad indefinida, haciendo sandalias de cuero. Suena «Chick Corea» en un casete. Es la una de la tarde y entra el sol por la ventana de la habitación.)
(Se abre la puerta de la calle y aparece la cabeza de CHUSA, veinticinco años, gordita,
con cara de pan y gafas de aro.)
CHUSA.– ¿Se puede pasar? ¿Estás visible? Que mira, ésta es Elena, una amiga muy maja. Pasa, pasa Elena. (Entra, y detrás ELENA con una bolsa en la mano, guapa, de unos veintiún años, la cabeza a pájaros y buena ropa.) Éste es Jaimito, mi primo. Tiene un ojo de cristal y hace sandalias.
ELENA.– (Tímidamente) ¿Qué tal?
JAIMITO.– ¿Quieres también mi número de carnet de identidad? ¡No te digo! ¿Se puede saber dónde has estado? No viene en toda la noche, y ahora tan pirada como siempre.
CHUSA.– He estado en casa de ésta. ¿A que sí, tú? No se atrevía a ir sola por sus cosas por si estaba su madre, y ya nos quedamos allí a dormir. (Saca cosas de comer de los bolsillos.) ¿Quieres un bocata?
JAIMITO.– (Levantándose del asiento muy enfadado, con la sandalia en la mano.) Ni bocata ni leches. Te llevas las pelas, y la llave, y me dejas aquí colgao, sin un duro... ¿No dijiste que ibas a por papelillo?
CHUSA.– Iba a por papelillo, pero me encontré con ésta, ya te lo he dicho. Y como estaba sola...
JAIMITO.– ¿Y ésta quién es?
CHUSA.– Es Elena.
ELENA.– Soy Elena.
JAIMITO.– Eso ya lo he oído, que no soy sordo. Elena.
ELENA.– Sí, Elena.
JAIMITO.– Que quién es, de qué va, de qué la conoces...
CHUSA.– De nada. Nos hemos conocido anoche, ya te lo he dicho.
JAIMITO.– ¿Otra vez? ¿Qué me has dicho tú a mí, a ver?
CHUSA.– Que es Elena, y que nos conocimos anoche. Eso es lo que te he dicho. Y que estaba sola.
ELENA.– (Se acerca a JAIMITO y le tiende la mano presentándose.) Mucho gusto.
Bajarse al moro.