El obispo de Zamora se mostró este lunes "completamente sorprendido" y "consternado" al conocer la renuncia anunciada por Benedicto XVI de su ministerio de obispo de Roma y afirmó que el Papa "se significa" en la Iglesia católica con "una entrega total" y con "una extraordinaria clarividencia de pensamiento". "El gesto de renunciar le honra. Es un gesto que demuestra que en él no hay ni un atisbo de poder", destacó
Gregorio Martínez hizo estas declaraciones a Cope Zamora nada más terminar la misa que ofició en la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes, en la capital zamorana, en relación con la renuncia de Benedicto XVI a su ministerio de obispo de Roma que el Papa hizo pública durante un consistorio cardenalicio convocado para dar cuenta de unas canonizaciones, del que se hizo el correspondiente eco Radio Vaticana. "La renuncia es por motivos de falta de fuerza y la Iglesia le acompaña totalmente en estos momentos.
También le acompañará en el intervalo de tiempo que hay hasta el cónclave", añadió, en alusión al anuncio de la reunión de cardenales para el próximo día 28 de febrero. "Debemos pedir al Señor que el próximo papa lo sea para el bien de la Iglesia y que responda a las necesidades de este momento", anotó.
El obispo de Zamora, quien reiteró su consideración de "gran Papa" para Benedicto XVI, destacó las virtudes de Joseph Ratzinger, al que calificó de "íntegro, inteligentísimo y entregado plenamente" a la Iglesia. "Yo estaba en misa cuando me han dicho la noticia y estoy muy impresionado y afectado. Lo he querido mucho y creo que tiene una reflexión sobre la Iglesia y para la Iglesia de largo alcance en estos momentos", señaló. "Su nivel de pensamiento a los cristianos y al mundo es extraordinario. Tenemos que agradecer esa mente privilegiada que Dios nos ha regalado", agregó.
Monseñor Martínez aseguró que Benedicto XVI "debe ser recordado" porque ha hecho "un gran bien" a la Iglesia y a la humanidad. "Está por asumir todo el contenido que ha sembrado durante todos estos años", concluyó.