El procurador de la Unión del Pueblo Leonés (UPL), Alejandro Valderas, ha reclamado este jueves una revisión del mapa autonómico, para facilitar la autonomía de León, lo que el presidente en funciones de la Junta, Juan Vicente Herrera, ha calificado de "suicidio".
Alejandro Valderas, del Grupo Mixto, ha reconocido al comienzo de su intervención, en el debate de investidura de Herrera como presidente por otros cuatro años, que ha venido a las Cortes de Castilla y León a hablar de su "libro", es decir, a defender la autonomía para la provincia leonesa.
Por extensión, ha defendido que esta autonomía sería posible para todo "el viejo Reino de León", incluyendo a Zamora y Salamanca con León, ya que a su juicio la formación en la década de 1980 de la actual Comunidad Autónoma fue "irregular".
Valderas ha subrayado que el mapa autonómico "parece inamovible", pero "ninguna norma prohíbe" que se pueda cambiar.
En este contexto, ha citado casos como el valle leridano de Arán, que cuenta con un estatus propio dentro de Cataluña, que a su juicio sería posible en Castilla y León para diferenciar "las dos identidades, la de leoneses y la de castellanos viejos".
El procurador de la UPL ha reclamado "un mayor reparto de sedes autonómicas", para que no estén tan concentradas en Valladolid, que "lleva décadas beneficiándose" en detrimento del resto de la Comunidad.
Alejandro Valderas ha propuesto un plan para promover la identidad de León en paralelo a la de Castilla y otro para "salvar la lengua leonesa".
Por su parte, Juan Vicente Herrera ha recordado a Valderas que otros trece procuradores por León, del PP y del PSOE, no comparten que esta provincia se separe de Castilla, pese a reconocer que "del viejísimo reino de León es del que nace Castilla" siglos atrás.
"Castilla y León no está sujeta a revisión" y "sería un suicidio" esa separación incluso para la propia provincia leonesa, ha aseverado Herrera, quien ha abogado por "un autonomismo útil" en vez de "recuperar en el siglo XXI banderas históricas" ya superadas.
IU enarbola las demandas del 15-M
Por su parte, el procurador de Izquierda Unida (IU), José María González, ha trasladado a las Cortes las demandas del movimiento ciudadano 15-M, con peticiones como la paralización de desahucios por impago de hipotecas.
José María González, del Grupo Mixto, ha llevado "las voces de la calle" a las Cortes, durante el debate de investidura de Juan Vicente Herrera como presidente de la Junta de Castilla y León.
"Son propuestas que deberían ser de todos nosotros", ha aseverado González, y entre ellas ha destacado la paralización "inmediata" de los desahucios de personas afectadas por la crisis económica que no pueden seguir pagando la hipoteca de su vivienda.
El procurador de IU ha enumerado una serie de "problemas concretos, que necesitan soluciones urgentes", en especial para combatir el paro, y ha defendido que "hay alternativas" para generar en empleo, en campos como el medioambiente, las energías renovables o el amplio patrimonio cultural de la Comunidad.
Asimismo, ha calificado de "suicidio" la "bancarización forzada" de las cajas de ahorros de Castilla y León y ha reclamado una política fiscal "diferente", para que la Comunidad no dependa tanto de los recursos que llegan del Estado y aumente los suyos propios.
Por su parte, Juan Vicente Herrera ha respondido a González, al que ha definido como "portavoz transversal" del 15-M, que las medidas que propone "se apartan" de las defendidas por la Junta.
Al respecto, ha rechazado el cierre de la central nuclear de Garoña, situada al norte de Burgos, por "un capricho" del Gobierno, y ha descartado recuperar impuestos como el de patrimonio, al entender que "penalizaría" a la clase media y no a las rentas altas.
Herrera, por contra, ha defendido que cuando aumenta la actividad económica y el empleo, la Administración recauda más sin necesidad de incrementar la presión fiscal.