VALLADOLID | Cumbre del Microcrédito

Casi 140 millones de familias pobres se beneficiaron de un microcrédito en 2010

  • La cifra supone un 7,2% más de hogares que en 2009
  • Estos números se desprenden de un informe presentado este jueves en Valladolid

ICAL

Un total de 137,5 millones de las familias más pobres del mundo recibió un microcrédito en 2010 por parte de 3.652 instituciones de microfinanzas, lo que representa el mayor volumen de concesiones desde que se analizan este tipo de operaciones y un crecimiento del 7,28% sobre 2009. Por tanto, de ellas se han beneficiado unos 687 millones de personas –al considerar los hogares como unidades de cinco miembros-, lo que supone una cifra superior a la suma de la población de la Unión Europea y Rusia.

No obstante, el número de clientes de estas entidades de microcréditos se elevó hasta los 205,3 millones, aunque los más pobres representaron el 56,5%, 173,5 millones. Por tanto, en los últimos 13 años, el número total de familias pobres que han conseguido un microcrédito se han multiplicado por 18. Además, en la distribución por áreas, en la zona de África subsahariana 7,24 millones de familias recibieron un microcrédito; en Asia y el Pacífico, 125,5 millones; en América Latina y el Caribe, 2,19 millones; en Medio Oriente y África del Norte, 1,68 millones; en América del norte y Europa occidental, 41.809, y en Europa Oriental y Asia central, 233.810.

Asimismo, de los 173,5 millones de familias muy pobres que recibieron un microcrédito, 137,3 millones procedía de país en vías de desarrollo y el resto, 343.128 de países industrializados. Del total de clientes, el 82,3% fueron mujeres, 113,13 millones, si bien esta cifra era en 1990 de 10,3 millones. Además, las clientas totales alcanzaron los 153,3 millones, pese a que las mujeres son las "más excluidas" de la actividad bancaria. Estas conclusiones forman parte del informe anual 'Estado de la Campaña de la Cumbre del Microcrédito', que se presentó este jueves en Valladolid, siendo la primera vez que España acoge este acto, celebrado como punto de partida del evento que sobre esta materia tendrá lugar la próxima semana en la capital vallisoletana.

Asistieron a la presentación, que albergó la Feria de Valladolid, el alcalde de la ciudad, Francisco Javier León de la Riva; la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez; el futuro director de la Campaña de la Cumbre del Microcrédito y coautor del informe, Larry Reed; el segundo coautor y especialista en el sector, Jan Maes; el director de Comunicación de Citi España, Julio Carlavilla, y el director de la Campaña de la Cumbre, Sam Daley-Harris.

En ese sentido, Jam Maes expuso que los dos objetivos de la Campaña de la Cumbre del Microcrédito es conseguir que 175 millones de las familias más pobres del mundo, especialmente las mujeres, reciban este tipo de préstamos para trabajar por cuenta propia, así como otros servicios financieros y comerciales hasta finales de 2015. Indicó que las mujeres juegan un papel central ya que de ellas depende el resto de la familia. También, se marcan como reto asegurar que 100 millones de familias superen el umbral de 1,25 dólares por día, ajustado por la paridad del poder adquisitivo, entre 1990 y 2015.

METAS

Al respecto, el otro coautor del informe precisó que se está en vías de lograr la primera meta en el horizonte de 2015, pese a los fracasos experimentados en lugares como Andhra Pradesh, un estado indio, que según señaló, puso en riesgo el crecimiento constante de las microfinanzas. En este lugar, el exceso de entidades de microcréditos hizo que el promedio de este tipo de deudas de los hogares se elevara hasta los 1.700 dólares, frente a los 150 de otros puntos. Así, en noviembre de 2010, estas instituciones habían conseguido llegar a seis millones de personas, lo que provocó que las familias contrajeran más deudas de las que podían soportar en función de sus ingresos.

Ante esta situación, el gobierno indio aprobó una ordenanza que paralizó las operaciones en microfinanzas, lo que ha tenido un efecto sobre la consecución de los objetivos que la Campaña de la Cumbre del Microcrédito ambicionaba, puesto que los dos mercados más grandes en este tipo de operaciones son Bangladesh y la India. Si bien en este último país, cerca de nueve millones de hogares con microcréditos, que engloban unos 45 millones de miembros, superaron el umbral de 1,25 dólares al día.

Además, un 37% de las familias de la India estaba por debajo de este nivel al suscribir estos créditos. Al respecto, el informe estima que la crisis de Andhra Pradesh redujo un 10% la cifra de nueve millones de personas con más de 1,25 dólares al día. En Bangladesh, el estudio considera dos millones de familias alcanzaron este nivel, es decir, unos diez millones de personas.

CRISIS Y EFECTOS NEGATIVOS

El director de la Cumbre indicó que la crisis económica y financiera ha reducido, sobre todo, los que dependen de capital extranjero, mientras los que contaba con depósitos locales no han sufrido sus efectos. Por ello, Sam Daley-Harris sostuvo que este encuentro contará con una sesión plenaria sobre esta materia.

También, los autores de informe explicaron que la popularización de los microcréditos provocó en algunas áreas que se elevara la competencia entre las entidades prestatarias, lo que provocó un sobreendeudamiento de sus clientes. Uno de ellos, Larry Reed comparó esta vía de financiación con un "río", que no debe "desbordarse" para lo que es necesario poner límites a su cauce. Además, con el mismo símil, explicó la evolución de las microfinanzas como un "arroyo" que gana caudal hasta convertirse en un "torrente".

SIETE PASOS

Por su parte, Soraya Rodríguez explicó que los microcréditos, como herramientas para ayudar a los más pobres a salir de la crisis, deben recuperar el "alma" de las microfinanzas. Para ello, se pondrá en marcha el Sello de Excelencia en Microfinanzas por su Nivel de Alcance a los Pobres y su Poder Transformativo. Reconocerá aquellas instituciones que hayan logrado llegar a un número significativo de clientes más pobres y puedan demostrar el grado de abandono de la pobreza de sus usuarios. Es decir, que las familias garanticen la educación a sus hijos, la salud de sus miembros, la correcta alimentación y una vivienda adecuada.

El denominado primer paso consiste en no "causar daño" a los clientes, para evitar abusos y un uso responsable. "Conocer a su cliente" es el segundo ya que el informe sostiene que es preciso tener información detallada sobre las necesidades de los demandantes de microcréditos. También, deben "alentar los ahorros", es decir, no centrarse sólo en operaciones de préstamo. Para todo ello, se propone el cuarto principio, "promover la cultura financiera".

El quinto y sexto tiene que ver con el seguimiento de los proyectos vinculados a los créditos y su efecto transformador sobre la comunidad. El último, relacionado con sello, defiende reconocer la excelencia.