CONVENCIÓN NACIONAL DEL PP

Pablo Casado recupera un discurso más beligerante contra Pedro Sánchez para afianzarse como alternativa al PSOE en La Moncloa

El Partido Popular ha llenado la plaza de toros de Valencia en la clausura de su convención nacional

Castilla y León Televisión

El Partido Popular ha clausurado su convención nacional con una imagen que evoca a otros tiempos: 9.000 simpatizantes llenando la plaza de toros de Valencia. Ha recuperado así uno de los símbolos de sus victorias electorales y también el perfil más duro de Pablo Casado. "Nosotros le decimos a la izquierda: saquen sus manos de la educación, de la economía, de la moral, de la historia, de nuestras vidas", asestaba el presidente del partido.

Ha ofrecido un contrato social a los españoles en el que promete derogar las leyes feministas, la reforma educativa y sustituir la ley de la eutanasia por una de cuidados paliativos. Además, propone una bajada de impuestos y una estrategia contra la despoblación, "y no la protección del lobo y la demonización de la ganadería como hacen los irresponsables comunistas arruinando los intereses de regiones como mi querida Castilla y León".

El líder del Partido Popular no solo ha hablado con contundencia contra el Gobierno, también contra VOX, refiriéndose a ellos como "los que vinieron a sustituirnos" pero que "se han ido quedando por el camino". "El PP es mucho PP", ha insistido.

La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, se ha mantenido en segundo plano para no eclipsar a Casado, quien se sentía reforzado al término de la convención. Le ha arropado también el expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps, quien no acudía a un acto del partido desde hace una década, cuando dimitió al ser investigado por el caso Gürtel.