El incendio de Calcena, en Zaragoza, ha entrado esta mañana en el parque natural del Moncayo. Las llamas han arrasado más de 2.500 hectáreas a pesar de los esfuerzos de 200 efectivos, parte de ellos bomberos desplazados desde Lubia, en Soria. La misma lucha contra el fuego se está librando entre Madrid y Ávila.
El monte ha estado iluminado toda la noche muy cerca de Robledo de Chavela y Valdemaqueda, en Madrid. Unas dos mil personas han sido desalojadas de sus casas ante una catástrofe ambiental que se cree que no se ha producido sola.
"Ha habido 4 focos en distintos sitios y distintos lugares. Entonces la impresión que nos da es que ha sido intencionado. Es muy difícil que un incendio de estas características se produzca casualmente", comenta Álvaro Santa María, alcalde de Valdemaqueda.
Los vecinos de las dos localidades madrileñas han pasado la noche en ascuas. Al llegar la mañana se han incorporado varios medios aéreos a la extinción de los seis focos, dos de los cuales permanecen descontrolados. Desde tierra cuentan con la ayuda de varias dotaciones de los bomberos de Castilla y León desplazados desde Ávila, que luchan contra las llamas en el límite con la provincia de Madrid.