La de Castilla y León es, probablemente, la situación más peculiar de todo el país. No solo porque se divide en pequeñas zonas básicas de salud, sino porque el Gobierno Central ha enmarañado un poco más ese mapa en las últimas horas. El viernes por la tarde, cuando el resto de España conocía exactamente qué zonas pasaban a la fase 1, Castilla y León recibía dos versiones diferentes del mapa en cuestión de minutos. Este sábado con la publiación en el BOE, conocemos  con exactitud las áreas que sí cambiarán su situación a partir del lunes.

En concreto, han recibido la autorización del Ministerio de Sanidad las zonas básicas de salud de Muñico en Ávila; Sedano, Valle de Losa, Quintanar de la Sierra, Espinosa de los Monteros, Pampliega, Valle de Mena en Burgos; Truchas, Matallana de Torío y Riaño en León; Torquemada en Palencia; Aldeadávila de la Ribera, Lumbrales y Miranda del Castañar y Robleda en Salamanca; San Pedro Manrique en Soria; Alaejos, Mayorga de Campos y Esguevillas de Esgueva en Valladolid; Alta Sanabria, Carbajales de Alba, Tábara, Santibáñez de Vidriales, Alcañices, Corrales del Vino y Villalpando en Zamora.

Por su parte, la provincia de Segovia sería la única sin territorios aprobados para pasar a fase 1 este próximo lunes, 11 de mayo. Zamora es la provincia con más áreas: siete en total; le sigue Burgos, con seis. 

Finalmente son 53.000 vecinos de Castilla y León los que van a tener un poco más de margen de movimiento a partir del lunes. Ninguna capital de provincia pasa a la siguiente fase.

Desde la Junta de Castilla y León aseguran que se han enterado a través de la rueda de prensa de este viernes de las zonas básicas de salud que pasan finalmente a la Fase 1. Al inicio de la semana, eran 26 las candidatas. Luego, 39. Pero ayer, Fernando Simón retrocedía y confirmaba que las 26 iniciales eran las que iban a señalarse en verde. No sin antes hacer público un mapa que no coincidía con la realidad.