Gemma del Caño, Farma Gemma, nos enseña a lavar los alimentos de manera apropiada. Todos creemos que lo hacemos bien, pero la realidad es otra. ¿Tú solo les pasas por agua? No es suficiente, hay que frotarlos debajo del agua (o en un recipiente) durante un rato. 

En el caso de que sean para grupos de riesgo como las embarazadas, los niños, personas inmunodeprimidas o mayores, tendremos un trato especial. Ahí debemos utilizar lejía para desinfectar los alimentos. No podemos usar la misma que usamos para el baño, salvo que lo ponga en la etiqueta. Existen lejías específicas para el uso alimentario. Pero, ¿qué cantidad? 4 o 5 mililitros por cada 3 litros (o por 1 litro, 1,5 mililitros). El procedimiento comienza frotando los alimentos bajo el agua y lo ponemos a remojo con el agua con esa cantidad de lejía durante cinco minutos. Después no podríamos consumirlo, tendríamos que aclararlo antes. Farma Gemma nos indica que dejarlo más tiempo no hará que la limpieza sea mejor. 

Las bolsas de frutas y verduras que venden en el supermercado ya lavadas son una alternativa perfecta para despreocuparse, pero siempre hay que seguir la fecha de caducidad. Y si vamos a cocinar las verduras, hortalizas, frutas o ultracongelados, no los tenemos que lavarlas. 

Y, por supuesto, no recomienda usar el vinagre para desinfectar.