Agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional de Salamanca junto a funcionarios de Vigilancia Aduanera culminaron con 14 detenciones la denominada operación 'Juntay' contra el fraude, las falsedades documentales y el cultivo y tráfico de sustancias estupefacientes.
Según el relato policial, la investigación comenzó, en una primera fase, hace unos once meses en Salamanca, en el marco de la operación ABG, cuando agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras tuvieron conocimiento de una red dedicada a favorecer la inmigración ilegal. Se trataba de un grupo organizado, con una estructura asentada en la capital del Tormes, y cuya actividad se dirigía a promover el tráfico ilegal de ciudadanos marroquíes.
Para su actividad delictiva utilizaban documentos falsificados que los propios miembros del clan presentaban en el Ayuntamiento de Salamanca. La investigación continuó con el seguimiento del destino de los certificados de empadronamiento obtenidos fraudulentamente.
En esta segunda fase de la investigación, los agentes comprobaron que, además de favorecer la inmigración irregular, utilizaban la documentación obtenida fraudulentamente para solicitar distintas ayudas en las administraciones públicas, obteniendo de esta forma grandes beneficios.
El modus operandi consistía en elaborar contratos de arrendamiento, y contratos y facturas de suministro de luz o agua falsos, que utilizaban para empadronarse. Posteriormente, conseguían la expedición del DNI con los mismos datos y presentaban solicitudes de ayudas en las diferentes administraciones, locales y regionales, junto a otros documentos, también falsos, como nóminas y recibos bancarios. Así consiguieron ayudas de Bienestar Social, de Alquiler y de Renta Garantizada del Ciudadano por valor inicial superior a 70.000 euros, aunque la Policía no descarta que sea mucho mayor.
OPERATIVO POLICIAL
La investigación policial se centró en las nuevas falsedades presentadas ante las administraciones por los investigados, ya procesados anteriormente. El operativo como tal se inició en la mañana del 13 de julio con un dispositivo de localización y detención coordinado, en el que, además de la Brigada de Extranjería y Fronteras, participaron otras unidades de la Comisaría de Salamanca, tanto de Seguridad Ciudadana (GAC y UPR), la Udyco de la Policía Judicial, la Policía Científica y especialistas informáticos, así como agentes de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera de Ciudad Rodrigo y Salamanca.
Según fuentes policiales, se practicaron registros en dos domicilios de Salamanca y uno de Ciudad Rodrigo, y durante los mismo se intervinieron distintos aparatos electrónicos para la confección de la documentación falsa, además de gran cantidad de dinero en efectivo.
Asimismo, dentro de las viviendas registradas, los agentes descubrieron dos cuartos en los que los detenidos tenían sendas plantaciones interiores de marihuana, y se incautaron de un total de 450 plantas de marihuana en distinto estado de crecimiento, además de útiles para su cultivo, tales como lámparas, sistemas de filtrado y acondicionamiento de aire, favorecedores del crecimiento de las plantas y abonos. También se intervinieron seis kilos de cogollos de marihuana envasados y preparados para su distribución y venta.
Además, la Policía constató que para el cultivo y el cuidado de las plantas, defraudaban con enganches ilegales tanto el suministro eléctrico como de agua, por lo que también se les imputan delitos.