SOCIEDAD

Un 70% de las denuncias por robo con violencia que se presentan en las comisarías de Castilla y León son falsas

Nueve de cada diez son retiradas antes de que la Policía ponga en marcha una investigación y sólo un centenar al año llega a los juzgados.

Ical

Cerca del 70 por ciento de las denuncias por robo con violencia que se presentan en las comisarías de policía de Castilla y León son falsas y aunque en la mayoría de los casos su único objetivo es lograr una indemnización ilícita del seguro, también se suelen emplear para intentar ocultar gastos de dinero difícilmente justificables. Por este motivo, se han convertido en una herramienta a la que recurren con relativa frecuencia ludópatas, adictos a las drogas o incluso personas que después de gastarse una importante cantidad en clubes de alterne se inventan un atraco para no tener que dar explicaciones en el seno familiar.

A pesar de este alto porcentaje, fuentes del Cuerpo Nacional de Policía confirmaron que sólo entre el cinco y el diez por ciento de las denuncias falsas se acaban transformando y llegan a los juzgados como acusaciones de la propia Policía por simulación de delito. Lo normal es que durante la tramitación y ante las advertencias de que puede estar incurriendo en un delito, el denunciante se achante y dé marcha atrás.

Sólo cuando el denunciante mantiene su declaración inicial y los indicios apuntan a que se trata de una simulación de delito, la Policía pone en marcha una investigación para demostrar con hechos o contradicciones el engaño y elevar la correspondiente denuncia ante los juzgados. En los últimos años las fiscalías de la Comunidad vienen incoando de media un centenar de diligencias previas por simulación de delitos. El pasado año fueron 104, diez menos en 2016 y 121 en 2015. A nivel nacional, fueron 20

Por provincias, León se situó a la cabeza en 2017 con 34 diligencias previas por este delito, por delante de Burgos (27), Valladolid (15) y Segovia (10). En el lado opuesto se situó Palencia, donde no se contabilizó ningún caso. En Ávila hubo dos, en Soria y Zamora, cinco en ambos casos, y en Salamanca seis.

Desde el Grupo III de la comisaría de Delicias de Valladolid se explica que en el caso de los más jóvenes, hasta los 22 años, la mayoría de las denuncias falsas responden a un intento de evitar una riña de los padres por la pérdida del teléfono móvil o las llaves de casa. En estos casos muchas veces son los propios testigos que aportan el denunciante los que acaban confesando, cuando se les advierte que colaborar en una denuncia falsa les puede generar antecedentes penales, y en otras ocasiones son los propios jóvenes los que reconocen que presentan la denuncia por indicación de sus progenitores.

Además de teléfonos móviles de alta gama, los casos más frecuentes de simulación de delitos a los que se enfrenta la Policía están relacionadas con el robo de vehículos y los atracos a bares.

Aunque son los menos, la Policía también reconoce que detrás de estos intentos de estafa a las aseguradoras también hay personas en dificultades económicas, e incluso casos en los que el denunciante acude a la comisaría aconsejado por el propio corredor de seguros. No obstante, tanto del CNP, como desde la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa), la patronal que agrupa 200 compañías que juntas representan el 96 por ciento del negocio en España, se coincide en señalar que la principal razón que hay detrás de estos delitos es la falta de conciencia, ya que estafar a una compañía aseguradora sigue sin tener ningún reproche social.

Los datos de Unespa muestran cómo un 63,6 por ciento de los casos de fraude detectados se dan en el seguro del automóvil, dado el predominio de este ramo y a la obligación legal de que los vehículos a motor circulen con seguro. De todas formas, una de las tendencias más llamativas de los últimos años es el crecimiento de los intentos de fraude de pequeño importe, menos de 500 euros. El pasado año, un 38 por ciento de los casos detectados respondían a este perfil. En comparación, en 2011 eran sólo el 29 por ciento. 

VeriPol

Para luchar contra esta práctica que repuntó de forma exponencial durante los peores años de la crisis y que en los últimos años se ha estabilizado, el Ministerio del Interior tiene previsto implantar en las próximas semanas, también en Castilla y León, el programa informático VeriPol, el primer sistema informático del mundo capaz de detectar mentiras gracias a la inteligencia artificial.