Incendios

El incendio de La Cabrera alcanza un perímetro de 8.000 hectáreas y avanza sin control hacia el Norte

Suárez-Quiñones lanza un mensaje de tranquilidad a la población porque existe un plan de defensa

Ical

El incendio declarado en la tarde del lunes en la comarca leonesa de La Cabrera abarca ya un perímetro de 8.000 hectáreas, aunque cuenta con zonas en el interior del mismo que no se han quemado, según aclaró el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, motivo por el que no se aventuró a dar una superficie concreta que ya se haya calcinado en el fuego más importante en lo que va de año en Castilla y León.

Durante el Consejo de Gobierno, Suárez-Quiñones habló de un fuego de carácter intencionado que cuenta con cuatro frentes y lanzó un mensaje de tranquilidad a la población. El principal, el norte, está "sin control" y se acerca a las localidades de Nogar y Robledo de Losada, que ya cuentan con un plan de defensa establecido para evacuar a la población si fuera necesario.

En relación con los frentes sur, este y oeste, actualmente "no tienen llama y no avanzan", pero admitió que son un "mar de rescoldos" y cualquier viento superior a 20 kilómetros por hora, que se prevé que se registren a lo largo de la tarde, "puede dar lugar a reproducciones". "Lo peor son las horas que vienen a partir de mediodía, porque aumenta la temperatura y la velocidad del viento y distorsionan las labores de extinción", sentenció el consejero.

Suárez-Quiñones se refirió a las circunstancias que dificultan los trabajos de extinción como la orografía escarpada de algunas de las zonas y el viento que no disipa el humo, queda en la superficie e impide la labor de las aeronaves y profesionales, a lo que se une la sequedad de la vegetación, más vulnerable a las llamas.

En estos momentos en la zona se encuentran desplegadas 535 personas que trabajan a turnos y con los descansos oportunos y 21 medios aéreos "que no pueden actuar con normalidad" ante la presencia de un denso humo.

Por ello, abogó por mantener la "tranquilidad y serenidad" de la población, cuya seguridad es el primer objetivo, y aprovechó para agradecer la colaboración de los ayuntamientos y el trabajo del personal, "que desarrollan su labor en unas condiciones muy complicadas".

El fuego ha afectado hasta el momento a una área de alto valor medioambiental de matorral, pero también matas de roble y repoblación de pino. No obstante, Suárez-Quiñones descartó que se haya calcinado grandes áreas de arbolado, pero sí alertó de que se trata de matorral "ya dañado por incendios anteriores, incluso quemados en este último invierno, al que no da tiempo a regenerarse".