El técnico del Real Valladolid, Onésimo Sánchez, ha manifestado en rueda de prensa, al aludir al enojo y a los insultos vertidos por varios aficionados a los jugadores durante los dos entrenamientos de ayer, que "no" se puede "enterrar a alguien que respira".
"Es el momento de tener la cabeza arriba, aunque te insulten. Así se pierde la razón. Hay que erradicar los insultos y la violencia. En Zaragoza y Tenerife se están frotando las manos con lo que está pasando aquí", ha dicho.
En este sentido, el preparador de la escuadra blanquivioleta ha reconocido que este miércoles 31 de marzo "fue triste y difícil", aunque ha reconocido que "la idea es abstraerse", dado que él sólo piensa en "fútbol".
Sin embargo, ha pedido a la afición que el domingo ante el Villarreal sólo vean "la camiseta y el escudo y no los nombres y las caras".
"Odio la violencia y este ambiente no es nada bueno. Las peñas tienen que estar a muerte con el equipo. Yo estoy trabajando y sintiéndolo y sé que 6 puntos de 27 son muy pocos. Si la próxima semana ya no estoy, los jugadores siguen. No los podemos cambiar. La manera de ayudar es estando a muerte con el equipo", ha manifestado.
De hecho, Onésimo ha recalcado que "no" escurren el bulto, puesto que es consciente de que el Real Valladolid "no" está "dando la talla" y que la "complicada situación" en la que se encuentran (decimonovenos a cinco puntos de la permanencia) es "responsabilidad" del equipo.
"Tenemos que pelear hasta el final. Si estamos a cinco puntos cuando falten seis por jugarse seguiremos luchando. Si nos peleamos entre nosotros... malo. El 16 de mayo, lo que queráis. No es la manera. Es como si en el 'Oeste' somos cuatro y nos pillan en una emboscada, siendo los otros siete y el tiro se lo pegamos al de al lado para ser tres", ha explicado.
En concreto, se ha referido al entrenamiento del miércoles por la tarde, el cual, para él, "fue una sesión menos", pues "es muy triste que en tu casa tengas que llamar a la policía y los niños que están al lado tengan que escuchar las cosas que se dijeron", ha comentado Onésimo a la hora de explicar los motivos por los que la sesión de esta mañana ha sido a puerta cerrada.
"Les diría a esa gente que esa no es la manera. Hacía muchos años que no vivía nada en Zorrilla como ante el Espanyol (0-0). Si no es por la afición perdemos 0-2. Esa es la manera. Vamos a ver si somos los cuartos peores y si no, ya habrá tiempo de asumir responsabilidades. El primero yo", ha subrayado.
Por otro lado, ha opinado sobre la información dada el martes por un medio local en la que se hacía referencia a una supuesta salida nocturna de algunos jugadores por Salamanca el día antes al encuentro ante el Espanyol.
"Son temas que salen cuando las cosas van mal. Se lo he dicho a los jugadores. Si se demuestra que es verdad no los quiero ni un minuto más en mi vestuario. Es el momento de estar más metidos y no dar pie a eso, que para algo somos profesionales.
Pero para lanzar esas acusaciones se tienen que sacar las pruebas. Yo no soy policía, soy entrenador", ha asegurado.
"Si es verdad, queremos los nombres y las pruebas, porque sino están haciendo un daño irreparable. Tenemos que ser más serios y más con lo que nos estamos jugando", ha indicado.
También ha dicho que es cuestión del club "dilucidar" por qué se ha abierto expediente informativo y apartado de los entrenamientos al portugués Vitor Hugo Gomes "Pelé".
"A mí me informan de que es por temas extradeportivos, algo que se escapa de mi faceta. En el vestuario no he detectado nada porque si veo que fuma dentro de él no lo permito. No he visto ni humo", ha puntualizado.
Sobre el próximo adversario en Liga, el Villarreal (domingo, estadio José Zorrilla), ha analizado: "Es un equipo súper ofensivo que ahora está en un buen momento. Con muchas alternativas y esperamos que quiera la pelota, pero es once contra once".