ATLETISMO | LONDRES 2012

"Lo único que quiero es no defraudar"

  • La atleta vallisoletana Elena Espeso acudirá a la cita olímpica tras obtener la mínima en el Maratón de Barcelona

Borja de Blas

Nunca es tarde para alcanzar la gloria. El próximo cinco de agosto, la vida de Elena María Espeso (Valladolid, 1972) dará un giro de 180 grados. A sus 39 años, la maratoniana disputará, en Londres, ante la atenta mirada del mundo, sus primeros Juegos Olímpicos. En el Maratón de Barcelona, la atleta castellana y leonesa paró el cronómetro en dos horas y 30 minutos, un registro suficiente para competir en la cita británica y defender los colores nacionales.

Una década atrás, nadie podía imaginarlo. En su primera experiencia en una de las pruebas más exigentes del panorama deportivo mundial, Espeso firmó un registro de tres horas y 56 minutos. Diez años después, esa marca se ha rebajado en más de una hora. Hay quien ve en Espeso un físico frágil, no apto para la alta competición. Los 42 kilómetros y 195 metros de que consta la cita por excelencia de unos Juegos Olímpicos se han empeñado en dar la razón a esta atleta esforzada, orgullosa madre de Lucas y de Elena y profesora de Educación Física en un colegio de Navalcarnero (Madrid).

“Mi primer objetivo es no defraudar”, reconoce Espeso, pese a que su entrenador la ve con opciones de finalizar la prueba entre las 20 primeras. Quizás su mejor aliada sea la ausencia de presión. “Yo solo soy profesora, ni siquiera me considero profesional”, clama la vallisoletana. Hace un año, en Hamburgo, Espeso terminó el maratón en un hospital, infectada por la bacteria E.coli. Pese a ello, tuvo los arrestos necesarios para cruzar la línea de meta tras dos horas, 36 minutos y 46 segundos de lucha contra sí misma. Pase lo que pase en la capital británica, Elena Espeso ya ha ganado una batalla, la de contar con la admiración de cualquiera que se acerque a una historia, la suya, repleta de agallas, de superación y de afán por disfrutar de su deporte.