Castilla y León se encuentra desde este viernes en un nivel tres de alerta, correspondiente a una situación de riesgo "alto" por el COVID-19, lo que supone una ampliación de horarios para la hostelería, que podrán abrir este viernes sus terrazas hasta la una de la madrugada, así como para las casas rurales, que podrán recibir a diez personas, de dos unidades de convivencia. 

La Junta de Castilla y León publica este viernes en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) el acuerdo adoptado este jueves por el Consejo de Gobierno, que declara el nivel de alerta 3 para todo el territorio de la Comunidad. Esta medida se revisará cada 14 días, se aplicará a partir de ahora por provincias y cada una de ellas tendrá que recorrer las cuatro etapas. 

No obstante, en el nivel 3 de alarma, no está permitido el consumo en barra y el ocio nocturno continuará cerrado, si bien se va a revisar a fondo la decisión adoptada de mantener este sector sin actividad hasta alcanzar niveles de la nueva normalidad. En caso de que aumentará la incidencia por un brote, la restricción o el cambio de nivel se localizará en el municipio afectado.

También, la Junta de Castilla y León publica en el Bocyl la modificación del acuerdo adoptado el pasado 6 de mayo y que actualizó ya los niveles de alerta sanitaria y el Plan de Medidas de Prevención y Control para hacer frente a la crisis sanitaria.

En ambos casos, las decisiones de la Junta, publicadas en el Bocyl a partir de las 09.00 horas, entraron en ese momento en vigor. Además, contra ellas se puede presentar un recurso de reposición en el plazo de un mes ante el propio Ejecutivo o ante la Sala de lo ContenciosoAdministrativo del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, con sede en Valladolid.