Menos, pero todavía hay viajeros del AVE a Madrid que han seguido cubriendo ese trayecto a diario pese a la pandemia, el miedo y el riesgo que sentían que corrían ellos y también los suyos. La estación del Norte en Valladolid recupera muy poco a poco la normalidad.

Antes del estado de alarma eran 2.000 viajeros. Ahora apenas, 50. Aún así Renfe ha anunciado que finaliza la flexibilidad de los abonos y obliga a gastar en 8 días el abono de 10 viajes.

Santigo vuelve casa después de doce horas. Repite el ritual, y enciende el ordenador. Aún tiene trabajo por hacer. Su familia ha vivido el confinamiento con una preocupación extra. Lleva años madrugando mucho para coger el tren para ir a trabajar. No ha dejado de hacerlo. Su empresa es servicio esencial. Son pocos quienes siguen pisando el andén cada mañana.

Hace semanas que la frecuencia de los trenes es menor: a primera hora solo hay dos opciones. La estación es parada obligada para 50 personas. Hace unos meses 2.000 viajaban cada día desde Valladolid y Segovia con destino Madrid.