La monitora acusada de acabar el pasado 15 de agosto con la vida de tres menores discapacitados en un centro de Mensajeros de la Paz en Boecillo (Valladolid), Graciela B., fue trasladada este sábado a un centro hospitalario de la capital después de que se cayera de una galería del centro penitenciario de Villanubla (Valladolid), con una altura similar a un segundo piso, y sufriera heridas graves.

Fuentes oficiales explicaron que no está claro si se cayó de forma accidental o se intentó suicidar y que, al parecer, se ha roto la cadera, aunque su vida no corre peligro.

Graciela B., de 55 años de edad, está acusada de asesinar el pasado 15 de agosto a tres niños discapacitados de tres, ocho y trece años de edad, todos ellos con movilidad reducida de entre el 78 y el 90 por ciento y bajo la tutela de la Junta de Castilla y León, que vivían en un centro de acogida y atención a discapacitados en la localidad vallisoletana de Boecillo gestionado por la ONG Mensajeros de la Paz, donde trabajaba como cuidadora.

Desde el 26 de agosto permanecía recluida en el centro penitenciario de Villanubla después haber estado doce días ingresada en el módulo penitenciario del Hospital Clínico Universitario de Valladolid para ser tratada por las lesiones que ella misma se provocó después de que presuntamente asfixiará a los tres menores.