La rápida intervención de los familiares y amigos de una pequeña de 7 años que estaba siendo atacada por dos mastines ha impedido la tragedia en una pequeña urbanización de Segovia. Los testigos aseguran que fue empujada por la espalda y que el dueño de los perros se dio a la fuga.

Son las secuelas de un gran susto que pudo haber acabado en tragedia. La pequeña de 7 años jugaba a las puertas de su casa en una zona ajardinada cuando, según los testigos, dos mastines de grandes dimensiones la abordaron por la espalda y la tiraron al suelo donde aseguran que fue atacada. La rápida intervención de los familiares y de un amigo que se encontraban cerca, evitó la tragedia.

Traslada de inmediato al hospital la niña fue atendida de las heridas. Acto seguido la familia telefoneó a la Guardia Civil que comenzó la búsqueda del propietario de los mastines.

Los vecinos de la zona aseguran que no es extraño ver a perros sueltos por la urbanización. Pasado el susto, la familia sólo espera que este suceso no vuelva a producirse.