En La Lastrilla, un municipio situado a seis kilómetros de Segovia, encontramos un lugar donde catar champán de pequeños productores artesanos franceses. Nos encontramos en Á la Volé, un proyecto alejado de clichés comerciales, con alma e historia. Allí, junto a Álvaro Moreno, su impulsor, aprendemos a catar estos champanes.

Para catar un champán lo primero es conocer qué es. "Champagne es una región francesa muy fría en la que apenas tenemos horas de sol y los suelos son calcáreos, completamente blancos", explica Álvaro. Dos características que marcan completamente el carácter de estos vinos a la hora de la cata. Después se procede con las tres fases principales: la visual, la olfativa y la gustativa.