SUCESOS

La Policía Nacional baraja que el joven ahogado en el Duero pudo sufrir un shock por el agua fría que ronda los cinco grados

El cuerpo fue encontrado a dos metros y medio de profundidad, cerca del lugar donde se le vio por última vez

Ical

El jefe de Grupo Operativo y jefe de Especialidad de Buceo, del Grupo Especial de Operaciones de la Policía Nacional, el inspector Pelayo Gayol, aseguró en Soria que el joven de 20 años, cuyo cuerpo sin vida apareció este jueves en el río Duero, pudo fallecer tras sufrir un shock por las bajas temperaturas del agua, que ronda los cinco grados centígrados. Precisó que este tipo de shocks son habituales cuando la gente se baña en temperaturas frías, incluso en la gente joven, aunque reconoció que, de momento, se desconoce si la persona de nacionalidad del Chad era un experto nadador. 

El inspector Pelayo Gayol atendió a los medios comunicación después de haber encontrado el cadáver de la persona sobre el mediodía, después de que este miércoles por la tarde y anoche realizaran varias inmersiones para localizar el cuerpo. Tras ser avisados por la Comisaría Provincial de la Policía Nacional, el grupo operativo, especializado en buceo, se desplazó desde Guadalajara a Soria para tomar el mando de las operaciones del dispositivo de búsqueda y trabajar sobre el terreno. Los agentes se fueron del río sobre la medianoche y hoy retomaron las tareas a las 9 horas. 

Visita guiada con cuidadora

El responsable del operativo subrayó que las primeras horas son claves para la localización de una persona en el agua. De ahí que valorara la importancia de saber el lugar lo más aproximado posible del punto donde se vio al bañista por última vez. En este sentido, la cuidadora de la Fundación Cepaim, quien acompañaba en una visita guiada por la zona a los jóvenes refugiados del Programa Internacional de Ayuda Humanitaria, ofreció todos los datos al estar presente cuando los inmigrantes decidieron bañarse. 

El inspector de la Policía Nacional apuntó que los dos buzos pudieron comprobar, desde el primer momento, la baja temperatura del Duero y la visibilidad nula bajo el agua y una velocidad de la corriente entre uno y nudo y medio. Finalmente, el cuerpo fue encontrado en el fondo del río, a una profundidad de dos metros y medio, no muy lejos del lugar donde se le había visto por última vez. 

En cuanto a las técnicas utilizadas por el Grupo Especial de Operaciones, explicó que ayer se probó el método del disparo pero sin suerte, por lo que se procedió a utilizar el cabo de plomo, que se mueve poco a poco desde la orilla hasta el centro del río para localizar el cuerpo en las profundidades. 

En presencia del subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, el comisario provincial del CNP, Honorio Pérez, agradeció la celeridad del cuerpo de élite para sumarse al dispositivo de búsqueda del joven. Señaló que, desde el primer momento, la Policía Nacional se volcó en el suceso, con una veintena de agentes, además de contar con la colaboración de la Policía Local y los Bomberos de Soria. 

Pese a apuntar que el asunto estaba judicializado, confirmó que el joven tenía 20 años y era natural del Chad, además de llevar poco tiempo en España, donde estaba en acogida de protección internacional en la asociación Cepaim. Añadió que, de momento, no se había podido contactar con la familia para proceder a la repatriación del cadáver a su país de origen.