En El Burgo de Osma, el Obispo Abilio Martínez Varea presidía la procesión de Domingo de Ramos desde la ermita de Santa Antón. Los cofrades, además de palmas bendecidas, portaron ramas de olivo y romero. Debido a las obras en la torre, el paso de la cofradía no pudo entrar en el interior de la catedral. Gran participación de niños y niñas burgenses ataviados como hebreos en esta procesión de la cofradía de los Misterios y Santo Entierro de Cristo que tiene sus raíces en el siglo XII.