La Universidad de Burgos está desarrollando un proyecto colaborativo para desplegar en Burgos una red que dé cobertura al internet de las cosas. Permitiría a cualquier usuario instalar sensores, a bajo coste, para medir parámetros como temperatura, humedad o detección de movimientos, con innumerables aplicaciones en domótica y en las zonas rurales.
El primer paso será desplegar la infraestructura básica, con unas pequeñas antenas que recojan los datos enviados por los sensores de los usuarios. Ya están instaladas 8 antenas y el reto es completarla en 2021. Su principal ventaja es el coste: no se paga tarifa alguna.