Así cómo van a ver quedaba la academia de idiomas de Gustavo Álvarez, el soriano más perjudicado por esa dana de Valencia. Las instalaciones quedaron completamente destrozadas. Y es que el negocio se ubica a menos de 500 metros del barranco del Poyo, una de las zonas arrasadas por la riada. Hasta marzo no pudo reanudar la actividad.