La fotografía digital ha introducido muchas ventajas, como posibilidad de retoques y ajustes, pero la foto no deja de ser un producto artesano. Volver a los orígenes es hoy un desafío de romántico, que ofrece muchas posibilidades de expresión. Es lo que nos encontramos estos días en el Casino, Pablo de la Peña ve con esta exposición un sueño cumplido.