EL CORREVUELA

Un cortejo maratoniano

Castilla y León Televisión

El caracol es uno de los no tan pocos ejemplos de animales hermafroditas, lo que quiere decir que puede desarrollar células reproductivas masculinas y femeninas. El hermafroditismo suele desarrollarse en animales solitarios, para los que es difícil encontrar posibles parejas reproductoras, pero ese no es el caso, desde luego, de la granja que hemos visitado en Arenas de San Pedro.
Se trata de una de las instalaciones más grandes de España dedicadas a la helicicultura y allí nos han explicado la curiosa forma de aparearse que tienen estos animales. El cortejo es una especie de danza o enfrentamiento, según se mire, para ver quién consigue clavar antes al otro lo que se conoce como dardo calcáreo, una espina de calcio que desarrollan los individuos y que determinará cuál de los dos ejercerá el papel de macho durante la reproducción. El proceso puede llegar a prolongarse más de diez horas.
Colocan los huevos bajo tierra, unos cinco en cada puesta, y posteriormente se incuban en una sala aclimatada para la llegada de los pequeños caracoles.