Es una variante del rugby no muy conocida, pero que cada vez cuenta con más adeptos. Las razones, la posibilidad de practicarlo, al mismo tiempo, padres e hijos, y los valores que transmite, entre otras. "Nada mejor que venir a hacer deporte con tus hijos", explica Lili Gualdrón, jugadora del Arroyo Alligators Touch.

En este club vallisoletano practican este rugby sin contacto. Son los primeros en España en contar con una sección íntegramente femenina; hito al que unen su regreso a la Liga Nacional, la máxima categoría en nuestro país. "En Australia y Nueva Zelanda es muy conocido, aunque aquí está un pelín denostado", apunta Israel Pérez del Campo.

Él será el representante de los Alligators en el próximo mundial, que se celebrará en julio en Nottingham (Reino Unido). Al mismo tiempo que el propio touch crece, lo hacen también otros estamentos, como los árbitros, que ejerce una labor parecida a la de un "profesor". Una evolución constante en la que el Arroyo Alligators Tocuh se ha convertido en uno de los máximos exponentes.

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