SURCOS | EL PERSONAJE

Una decoradora de interiores a los mandos de una granja de gallinas

Castilla y León Televisión

La historia de Claudia refleja que en la vida hay que dejarse llevar. A sus 28 años, esta mexicana afincada en Valladolid por amor, decidió cambiar su trabajo de arquitecta y decoradora de interiores y apostar por invertir en una granja de gallinas camperas.

Todo ocurrió durante la pandemia, el verse encerrada en una oficia supuso para ella un punto de inflexión. En ese momento, y junto a su marido, se interesaron por la compra de una granja de gallinas. La decisión no fue sencilla, pero desde el primer momento tuvieron claro que esa granja tendría que ser de ellos.

Su aprendizaje fue rápido y después de tres años no puede estar más feliz con la decisión que tomo. Ella se encarga de criar a las gallinas, de empaquetar los huevos y de llevarlos directamente hasta sus clientes. Por cierto, nos dice que la calidad del huevo viene dado por el modo de crianza de la gallina y por su frescura cuando llega hasta el consumidor.