El Ministerio de Sanidad alerta del riesgo de las conocidas como pseudoterapias: tratamientos que se presentan como científicos, pero que son incompatibles con la ciencia. Se han analizado más de 139 técnicas alternativas en nuestro país y 71 de ellas no tienen la suficiente solidez para decir que son efectivas.

Muchos pacientes acuden a este tipo de terapias desesperados por dolencias que no tienen cura. Es el caso de Javier Tovar. Hace más de 20 años que le diagnosticaron esclerosis múltiple. A pesar de la medicación, su enfermedad avanzaba sin freno. Fue entonces cuando decidió acudir a un médico que emplea terapias alternativas.

A Javier le ofrecieron comenzar la terapia sin cobrarle nada. "El día que empieces a andar ya te empiezo a cobrar", le dijo el médico. Le extraía sangre, la mezaclaba en una máquina con ozono y se la volvía a inyectar. También le ponía alfileres por el cuerpo, pero nunca volvió a caminar.

"Hay quien ejerce partes de la medicina con un uso a lo mejor un poco pseudocientífico y otros que están en una aberración absolutamente desde el punto de vista médico", explica el presidente del Colegio de Médicos de Palencia, José del Riego. Y ahí está el peligro. Especialmente cuando el paciente abandona el tratamiento oficial. Desde el colectivo médico exigen que la ley penalice estos casos. Actualmente, la mayoría de las denuncias se archivan.