El medio rural ofrece múltiples oportunidades y Víctor Luna ha decidido aprovecharlas. Se trata de un joven emprendedor que estudió Administración y Dirección de Empresas y que ha vuelto al pueblo de su madre para convertir un antiguo caserón, que llevaba treinta años abandonado, en un negocio de hostelería rural. Después de trabajar en el sector energético, ha dejado Madrid para vivir en Granja de Moreruela, donde ha construido una vivienda de uso turístico en una pequeña villa zamorana.
Y además, en Tierra de Pinares, Jesús Santos se ha convertido en farmacéutico rural. En Madrid, este técnico de la industria farmacéutica, se dedicaba a comprobar la eficacia y la seguridad de los medicamentos y ahora su trabajo es mucho más cercano y personal ofreciendo un necesario servicio en Olombrada. Este programa le ha cambiado el rumbo de su vida. Después de ver varios capítulos de Me vuelvo al pueblo, Jesús y su mujer Pili, ingeniera industrial, se han trasladado a la provincia de Segovia.