La Inteligencia Artificial y el Big Data nos orientan en nuestro día a día mucho más de lo que pensamos, pero también sirven para llegar a niveles de investigación antes impensables. En el Hospital Río Hortega de Valladolid lo aplican para predecir el área de expansión del tumor cerebral más dañino y así prolongar la supervivencia del paciente.

El gliobastoma es el peor de los tumores cerebrales. La media de supervivencia suele ser año y medio. Lo sufren tres de cada 100.000 habitantes al año, lo que se traduce en 20 o 30 casos en el Río Hortega de Valladolid, hospital en el que un grupo de neurocirujanos combina las resonancias de decenas de casos anteriores con un algoritmo de inteligencia artificial y elaboran un modelo que permite predecir dónde crecerá el tumor en el futuro.

Santiago Cepeda es adjunto en el departamento de Neurocirugía del Hospital Río Hortega de Valladolid y explica que esta predicción puede ayudar a adaptar el tratamiento en los enfermos. "Conocer esto de forma anticipada nos permitiría poder adaptar nuestra cirugía para quitar las zonas de futuro crecimiento o también para adaptar el tratamiento radioterápico en los tumores cerebrales. Permitiría que la supervivencia de estos pacientes pueda prolongarse un poco más. Estaríamos optimizando el tratamiento de estos pacientes".

El proyecto está ahora a la espera de una beca nacional que aporte la financiación necesaria para validar los datos obtenidos gracias a la tecnología, en cada caso, de forma empírica.

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