SANIDAD CLASIFICA A LA POBLACIÓN EN TÉRMINOS DE CRONICIDAD

En Castilla y León hay 296.000 pacientes crónicos

  • Hay cuatro niveles. Desde personas sanas a pacientes pluripatológicos
  • El objetivo es mejorar la atención a los crónicos y reorganizar los recursos

Estefanía Ureña

Nunca antes en una comunidad autónoma se había establecido este sistema. En Castilla y León ya conoce qué porcentaje de la población está santa, más de 1.600.000 habitantes, es decir, el 69%, y cuántos ciudadanos son pacientes crónicos, 296.000.

A los castellanos y leoneses se nos ha dividido en cuatro grados. Desde el grado cero, que engloba a personas sanas, hasta el grado tres, pacientes crónicos con varias enfermedades complejas. Esta clasificación servirá para reordenar los recursos sanitarios.

Hasta ahora la carga de trabajo de los médicos se basaba en el número de pacientes que atendían y la edad de los mismos. Eso significa que hay facultativos con 1.200 tarjetas, por ejemplo, de las cuales el 90% corresponden a personas sanas. Sin embargo, otros médicos, pueden tener el mismo número de pacientes, pero con un porcentaje igual de personas con enfermedades graves. Obviamente la carga de trabajo no es la misma.

De hecho se sabe que una persona sana acude a su médico de familia una media de ocho veces al año, mientras que un paciente crónico puede realizar hasta 28 visitas a su centro de salud. Eso se traduce además en un coste de 170 euros anuales en recetas para el primer grupo y 1.031 euros anuales en el segundo.

La clasificación de los pacientes, dependiendo de su estado de salud, no sólo permitirá reorganizar los recursos, si no también mejorar la atención de estas personas. Cada médico de la región tendrá acceso a toda esta información.

Información que se ha elaborado a partir de la utilización de más de cuarenta millones de datos clínicos: número de visitas al médico, número de recetas dispensadas, cantidad de medicamentos consumidos o días de hospitalización.