Efe / Madrid
La familia Casado, fundadora del grupo de bollería del mismo nombre, ha ejercido su derecho de recompra y ha recuperado de manos de Siro su marca, que ahora ha vendido a Dulcesol.
Siro compró en 2008 la fábrica de Casado en Medina del Campo (Valladolid) y han detallado que esta planta seguirá en sus manos, ya que continuará produciendo en ella alimentos para Mercadona, del que es interproveedor y con quien tiene comprometido el 80% de su fabricación.
Han recordado que Siro está centrada en cinco líneas de negocio, como son las galletas, los aperitivos, el pan de molde, la pasta y la pastelería y bollería industrial.
Han precisado que Siro mantiene su perfil de productor, por lo que mantiene su objetivo de desprenderse de los activos, es decir, las marcas a las que no pueden dar una salida en el mercado, y en cambio sus compradores le pueden dar ese "valor añadido".
La compañía vendió recientemente las marcas de galletas Río y Reglero a la firma Arluy, por lo que la única enseña que le queda para su venta es la de la Pasta Ardilla, ya que Siro, que da nombre al grupo, "no se vende".