No por ser habitual es legal, eso es lo que ocurre con la venta de animales entre particulares. Está totalmente prohibido pero hasta ahora nadie había sido sancionado, pero las cosas han cambiado. Un vecino de un pueblo leones tendrá que pagar 3.000 euros de multa por vender sin permiso perros de raza.
La Ley de Protección de Animales de Castilla y León se aprobó en 1997 y prohíbe la venta de animales entre particulares. Pero hasta ahora no se había fijado ninguna multa por este concepto. Llega ahora, un año después de la denuncia interpuesta por Defensa Animal Zamora en un pueblo de León.
La denuncia se interpuso durante la puesta en marcha de una campaña informativa sobre este tipo de prácticas. Se presentaron otras treinta más, la mayoría en la provincia de Zamora, aunque la administración aún no ha contestado a este colectivo. Para este colectivo, el problema de este negocio va más allá de la simple venta.
Por eso, aunque siempre recomiendan la alternativa de la adopción, piden que si queremos comprar un perro lo hagamos en un establecimiento con los permisos adecuados.