El presidente de los hosteleros de Castilla y León, Fernando de la Varga, asegura que la llegada de la nueva variante Ómicron y la subida de los contagios ha reducido las reservas de las cenas y comidas de grandes grupos, "pero las de 300 personas se están convirtiendo en 20 o 30 porque la gente quiere interactuar y vivir". Además, afirma que, para evitar las aglomeraciones, muchas celebraciones se han adelantado: "Si cae el servicio habrá menos contratación". 

"Me llama tremendamente la atención que cuando se entra en los locales la gente se quite la mascarilla y, en cambio, se la ponga fuera cuando es un espacio abierto". El presidente de los hosteleros habla de un problema de concienciación social. Destaca que con el pasaporte COVID se vende un mensaje erróneo de libertad, "no es barra libre para entrar en los bares sin mascarilla", así lo ha indicado en la entrevista de Cuestión de prioridades. Para Fernando de la Varga se trata, en realidad, de una herramienta que obliga a las personas que no se han vacunado a vacunarse.