Jerónimo Hernández de Castro tiene una doble vida. Cada mañana se levanta para caminar por el centro de una ciudad que le "rodea con estímulos de arte e historia" para dirigirse a la Universidad de Salamanca, donde es jefe de protocolo en el Rectorado.
Pero cada tarde, a eso de las 20 horas, Hernández de Castro se convierte en Jero, el concursante que de lunes a viernes derrota desde hace ya 52 programas a sus adversarios en 'Pasapalabra', el famoso concurso televisivo. Sin embargo, no es la primera vez que Jero Hernández participa en este tipo de programas, es un 'hombre-concurso'.
Todo comenzó en 2008. "Aunque antes ya fui a algún casting, mi primera aparición fue en 2008, en un concurso que emitió Cuatro que se llamaba 'El Gran Quiz'". En aquella adaptación española de un formato inglés, que consistía en memorizar 40.000 preguntas y sus respuestas, Hernández consiguió colarse entre los 24 finalistas. "Aunque yo no conocía a nadie, me enteré de que muchos de ellos eran la élite de los concursos: gente que se había llevado roscos en 'Pasapalabra' o que habían llegado a los cien programas en 'Saber y Ganar'", manifiesta divertido un Jero Hernández que, en caso de llevarse en los próximos días el bote del concurso en el que ahora participa, lograría ambos retos.
Ése fue el inicio de un periplo por varios concursos ('¿Quién quiere ser millonario?', 'Trivial Pursuit', '25', 'Cifras y Letras') que alcanzó su punto más álgido hace apenas un año, cuando el jefe de protocolo de la USAL llegó a las cien participaciones en el programa más longevo de la televisión española: 'Saber y Ganar'.
"Es una alegría muy grande porque te sientes parte de algo que hace feliz a mucha gente", relata quien no obstante asegura que más que esa, la meta en 'Saber y Ganar' es que no le eliminen. "Hay que ir partido a partido", revela, vinculando así su estrategia en los concursos con la filosofía del entrenador atlético Diego Pablo Simeone.
Aunque Jero Hernández afirma que "es una experiencia muy bonita" porque se conoce a gente muy diversa, desde los presentadores al personal técnico -que no se ve pero es maravilloso-, personajes famosos y otros concursantes con vidas y trayectorias muy interesantes con los que a veces organizan quedadas a través de Facebook, también expone la faceta exigente de los concursos. "Es una experiencia intensa y, si se prolonga, es muy cansada porque tienes que viajar muchos días y pasas horas metido en un plató".
Y es que las grabaciones de 'Saber y Ganar', que se producen dos días a la semana, comienzan a las 08.30 horas y finalizan a las 21 horas,con pausas que tampoco dejan descansar mucho a la mente aunque fomentan el 'buen rollo': "Entre todos buscábamos la parte por el todo y compartíamos conocimientos". Tampoco existe mucha relajación en 'Pasapalabra' durante las seis horas en que se graba dos o tres tardes a la semana: "Hay pausas pero para maquillaje, ajustes de cámara o sonido... No es solo mentalmente, físicamente también es muy cansado".
A todo ello hay que unir los viajes. "Madrid está más cerca pero a Barcelona salía en avión los lunes por la noche y, por tema de combinaciones, volvía los jueves a Madrid en tren y desde allí cogía el autobús a Salamanca". Horas y más horas de exigencia mental y desplazamientos que "sale de las vacaciones, de días sin sueldo y de la colaboración de los compañeros de trabajo, familia y amigos que se portan muy bien. Sin ellos, no lo habría podido compaginar", dice.
Estar junto a famosos...
Jero Hernández, sin embargo, lo tiene claro: "Compensa". "Es una situación muy estimulante porque conoces a personas con un mundo muy distinto", señala en referencia a la gran cantidad de famosos con los que compartió equipo en 'Pasapalabra'. "En 52 programas he tenido 16 parejas de famosos conmigo y 16 enfrente, y todos me han aportado algo", si bien destaca a algunos de ellos, como el mago Jorge Luengo, los cantantes de Estopa, DVicio y María Rozalen, el periodista y escritor Boris Izaguirre y King África, quizá el que más sorprendió a Hernández. "Tenemos esa imagen de él de la canción del verano pero después es una persona muy interesante, con la cabeza muy bien amueblada, con un oído musical increíble y una conversación y talante muy agradables".
Una de sus mejores experiencias se produjo en 'Saber y Ganar', donde conoció a Ibáñez y le llevó un tebeo de 'Mortadelo y Filemón' del año 1972 para que se lo firmase. "Eso para mí es un tesoro", relata este coleccionista de cómics que también consiguió aunar en alguna ocasión su trabajo con su faceta de 'hombre-concurso', como cuando logró que Juanjo Cardenal, la voz en off de 'Saber y Ganar', acudiese a la Universidad de Salamanca para leer unos versos de Unamuno: "Ha sido una de las grandes alegrías de mi presencia en la televisión. Sin ella no hubiese sido posible", declara.
… y ser famoso
Pero si conocer a gente famosa es una de las consecuencias de participar en los concursos televisivos, la otra es convertirse en uno de ellos, al menos parcialmente. "Lo más divertido viene cuando se junta una vida normal como la mía con la vida de famoso parcial y tienes que convivir con los dos mundos". Ahí es cuando llegan las anécdotas, como cuando la campeona mundial de salto de altura Ruth Beitia le pidió una foto por ser "Jero el de 'Saber y Ganar'", o cuando grupos de turistas, numerosos en una ciudad como Salamanca, le paran para fotografiarse con él y hablarle de sus vidas, aunque esté en medio de una entrevista.
"Cuando estás en antena mucho tiempo, te conocen en muchas partes. Es muy bonito porque recibes el cariño de mucha gente a la que le hace ilusión verte, abrazarte, fotografiarse contigo... Es muy grato ver que tu participación en un programa le hace ilusión a tanta gente", mantiene el jefe de protocolo de la Universidad de Salamanca, que vivió historias emocionantes como la de un niño que le paró en una playa de Asturias para decirle que su abuela le veía todos los días. "Me dijo que se murió unos meses antes feliz porque yo había llegado a magnífico en 'Saber y Ganar'. Cosas así te emocionan", refleja un Jero que asegura que "el 99,9 por ciento" de las anécdotas que ha vivido por salir en televisión han sido positivas.
Premios
Pero si hay una motivación, al menos inicial, que mueve todo concurso es el del premio. Hernández, no obstante, sentencia que no ha conocido aún a nadie que pueda vivir de esto. "Las satisfacciones son varias: primero está que te haga ilusión a ti, después el cariño de la gente y, ya por último, el dinero". Él ahí sigue, a la búsqueda del bote de 'Pasapalabra'. Y si lo ganara, como diría Cristian Gálvez, ¿qué haría Jero Hernández con tanto dinero?. "Es mucho y tendría que parar a pensarlo con mucha calma. Lo celebraría con algún viaje con familia y amigos y donaría parte del bote a Cáritas y a crear una 'spin-off' en el Parque Científico de la Universidad". "Es mucho dinero para gastarlo uno solo".
No obstante, él no se distrae pensando en el bote. Cada tarde, se pone el traje de 'hombre-concurso' y hace disfrutar con sus respuestas a miles de hogares en España. Porque Jerónimo Hernández, Jero, sigue con su filosofía de veterano ya en las lides televisivas. Partido a partido.