SOCIEDAD

La DGT interpone 119 multas por conducir vehículos sin llevar bien colocados a los animales que viajan en su interior

Castilla y León es la tercera Comunidad del país en la que más perros viven: 1 por cada 4 habitantes

Fátima Pérez

En lo que va de año, según datos de la DGT, se han interpuesto 119 multas por conducir un vehículo sin cuidar de la adecuada colocación de los objetos o de los animales que viajan en su interior. Castilla y León es la tercera Comunidad del país en la que más perros viven, 1 por cada 4 habitantes. Y en muchos casos, ellos se convierten en un miembro más de las familias, por eso, cuando sus dueños emprenden un viaje, deciden llevarles consigo. Pero hay que tener en cuenta que si el desplazamiento es en coche se debe cumplir con el reglamento existente.

Si nuestra mascota es de pequeñas dimensiones, lo mejor que podemos hacer es llevarla en la parte trasera de nuestro vehículo con un cinturón de tiro corto que se enganche a su arnés. Aunque otra opción podría ser meter a nuestro pequeño animal en un cofre de plástico y situarlo en el suelo, entre el asiento delantero y el trasero, asegurándonos de que no se mueve.

Pero ¿qué ocurre con las mascotas de grandes dimensiones?: "Se puede llevar suelto, pero siempre con un separador de carga para que no pueda incidir o pasar a las plazas traseras del vehículo", declara Marcelino Fernández, sargento primero del subsector de tráfico de la Guardia Civil de Valladolid.

El reglamento vela por una conducción segura, pues, "el conductor tiene que tener una libertad de movimientos, una atención permanente y no puede tener ningún tipo de interferencia. Para eso los animales de compañía tienen que ir sujetos”, asegura Inmaculada Matías, Coordinadora de la DGT en Castilla y León.

Además, el incumplimiento de esta normativa supone sanciones. "Si el perro va mal acondicionado o el conductor desatiende a la conducción son infracciones leves de 80 euros, y luego, si esa conducción por atender al perro deriva en una conducción negligente porque invade un carril o se sale parcialmente de la carretera, sería una infracción de 200 euros y ya tipificada como una infracción grave", explica el sargento Fernández.

Por eso, si queremos evitar multas y garantizar el bienestar tanto de las mascotas como de los ocupantes del vehículo, debemos cumplir con el reglamento.

 

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