Son tres vacunas infantiles las que no recoge el calendario oficial de vacunación de Castilla y León, competencia de las comunidades autónomas.
Porque aunque es el Consejo Interterritorial (formado por ministerio de Sanidad y autonomías) el que propone, son las regiones las que deciden si incluir o no las vacunas en sus respectivos calendarios.
Desde que un niño nace hasta los 14 años (en el caso de las niñas) no para de recibir vacunas: hepatitis B, difteria, tosferina, tétanos, sarampión... Todas ellas dentro de un calendario oficial que cubre la Seguridad Social en Castilla y León. Pero hay tres tipos que los padres tienen que pagar de su propio bolsillo.
No son oficiales, tampoco obligatorias, pero sí recomendables. Muy recomendables según la Asociación Española de Pediatría. La del neumococo es una de las ellas. Está enfocada a combatir las otitis, neumonías y meningitis. Desde hace siete años se utiliza en España. Sólo en Madrid y Galicia se incluyen en el calendario oficial.
Según el pediatra Dimas Romero "la del neumococo es una vacuna básica. Es importante ponerla porque es una enfermedad invasiva que puede provocar la muerte del niño".
En Castilla y León los padres que optan por ponérsela a su hijo deben pagar 233,73 euros. Porque cada dosis, son tres, cuesta en las farmacias 77,91 euros.
Otra vacuna que no es gratuita en nuestra comunidad es la del rotavirus. Esta se administra en dos dosis, cada una a un precio de 69,50 euros. En total 139 euros que los progenitores deben pagar.
El rotavirus provoca procesos de grastroenteritis en los más pequeños. "Se calcula que al año acuden a urgencias unos trece mil niños solamente a causa del rotavirus", según el doctor Romero, "un gasto hospitalario que podría evitarse si esta vacuna entrara en el calendario oficial".
La última de estas tres vacunas no oficiales es la de la varicela. De origen japonés, esta vacuna se administra desde hace cinco años en Europa y Estados Unidos. Sólo se dispensa de manera gratuita en una comunidad autónoma. Aquí cuesta en total 135,82 euros porque son dos dosis.
Según un estudio epidemiológico, gracias a la vacuna del neumococo se consiguió disminuir en España la incidencia de la meningitis de 18 casos por cada 100.000 niños en el año 2001, a 7 casos en 2006.Enfermedades que tienden a desaparecer pero gracias a que los padres pagan por esas vacunas.
Lo ideal sería disponer de un calendario oficial de vacunación infantil igual en todas las comunidades autónomas. Así lo reconoce el Director de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, Javier Castrodeza. "Es necesario tener un consenso para llegar a un calendario uniforme en todo el territorio nacional".
En la gran mayoría de los casos los padres anteponen las salud de sus hijos al gasto económico que supone adquirir esas vacunas.
"Si bajamos la guardia", añade el doctor Romero, "si dejamos de vacunar, vuelve a incrementarse la incidencia de las enfermedades. En Inglaterra, hace 5 años, un señor salió en televisión diciendo que la vacuna de las tosferina producía autosimo. Los padres dejaron de vacunar a sus hijos y se demostró que la tosferina reapareció de una manera espectacular".