Meses de espera, horas de reuniones con intermediarios de todas las esferas políticas y ecómicas pero todo se ha quedado en nada. la integración de Caja España Duero en Unicaja se esfuma. Hoy había doble cita una en Malaga y otra en Madrid con este mismo asunto en el orden del día.
 
Se paraliza la fusión Caja España-Duero con unicaja. El plan de reestructuración aprobado por Bruselas ha modificado el papel de cada una de las entidades. Caja España quiere acometerlo en tres meses en lugar de en dos años para que el saneamiento tenga reflejo cuanto antes en la cuenta de resultados. Así no tendría las manos atadas ante los nuevos escenarios que se presentan. Eso sí en esos tres meses tendrá que cerrar 263 oficinas y reducir la plantilla en 1.500 puestos de trabajo.

Caja España tiene por delante tres escenarios posibles. El primero: que el FROB, tras invertir 600 millones y convertir las anteriores ayudas de 500 millones en acciones, tenga más del 50% de la entidad. En ese caso se disolverían los órganos de gobierno y se nacionalizaría.

El segundo escenario plantea un gran peso del FROB pero sin superar ese 50%. Se implementaría el plan de reestructuración en esos tres meses.

En último escenario es que algún inversor comprara la participación del FROB antes de que este lo desembolse en febrero. Ese inversor se haría con Caja España y podría ser también Unicaja.