SAHÚGO, SALAMANCA

La única fábrica de serrín de Castilla y León exporta a Finlandia y Dinamarca

  • Inició su actividad en 2009 y es fruto del empeño de un grupo de vecinos
  • También llegan a otros países como Italia, Portugal y Francia

EFE / Salamanca

La única fábrica de 'pellet' (pequeñas cilindros de madera que sirven como combustible) de Castilla y León, ubicada en El Sahúgo, municipio salmantino donde viven 200 personas, ha logrado exportar su producción a países como Finlandia, Italia, Portugal, Francia y Dinamarca.

La fábrica, que inició su actividad en octubre de 2009, es fruto del empeño de un grupo de nueve vecinos de la localidad que pretenden obtener una riqueza añadida de todo el combustible que se desperdicia en los montes de la Sierra de Gata, donde se ubica este pueblo perteneciente a la comarca de El Rebollar.

Es una de las cuatro empresas que actualmente fabrican este tipo de combustible en España, según ha explicado hoy a Efe, Raimundo González, alcalde de El Sahúgo y socio de la misma, que se llama Tresmasa.

La venta de todo el 'pellet' la tienen asegurada, tanto en el mercado europeo como en el nacional, ha añadido.

"El único problema es que, debido a la crisis, muchos aserraderos de la zona han cerrado y, por tanto, hace falta serrín", según González. Por esta razón, compran también el serrín a serrerías de las provincias de Ávila, Valladolid y Zamora.

En la plata de fabricación tienen dos maquinas que son capaces de fabricar cada una cuatro toneladas de 'pellet' a la hora. La máxima producción la realizan en los meses de invierno, donde llegan a dar empleo a once personas y trabajan las 24 horas del día haciendo tres turnos laborales.

La primera parte de la fabricación consiste en eliminar la humedad del serrín, posteriormente pasa por un molino que unifica todo el grano y la última fase se denomina "pelletizado".

Se trata de compactar el serrín mediante un proceso de vapor de agua, que da como resultado el 'pellet', unos pequeños cilindros que se utilizan como combustible en las calderas y también para camas de mullido de animales, sobre todo en cuadras de caballos.

González ha insistido en el ahorro que supone este tipo de combustible, ya que es "totalmente limpio, ya que no genera ni ceniza ni humo y es mucho más económico que el gasóleo".

Un kilo de ese producto tiene un precio en el mercado que oscila entre los 20 y los 22 céntimos de euro y "está demostrado que dos kilos de combustible de 'pellet' equivalen a un litro de gasóleo".

Raimundo González también ha aclarado que una caldera alimentada por ese tipo de biomasa consume un cincuenta por ciento menos que una de gasóleo.

Esta empresa ha invertido algo más de cuatro millones de euros en la puesta en marcha de esta planta de fabricación, que ha sido subvencionada por los fondos europeos Leadercal, destinados a la financiación de proyectos pilotos en el medio rural.

Otro de los objetivos de Tresmasa es la generación de energía eléctrica a través del combustible que hay desperdiciado en el monte.

Se trata de un sistema que se denomina "cogeneración", que consiste en "transformar la materia leñosa del monte en energía eléctrica mediante la generación de calor y gas que, a través de una gasificación, se transforma en energía eléctrica para la red", según Raimundo González. Sin embargo, esta segunda iniciativa no la han podido realizar por la falta de financiación actual.

En Castilla y León, la empresa RIBpellet ha anunciado que instalará una planta de fabricación de 'pellet' en la localidad burgalesa de Huerta del Rey, que pretende generar 130 empleos, con una inversión de 15,8 millones de euros.