CORONAVIRUS

La historia de la vacuna de AstraZeneca

Castilla y León Televisión

A comienzos del mes de febrero empezaba a administrarse la vacuna de AstraZeneca en Europa, precedida de cierta tensión con la compañía porque comunicó que enviaría un 60% menos de las vacunas pactadas.

Entrado marzo aparecen dos casos sospechosos de trombosis en Austria y fallece una mujer de 49 años. A esos casos les suceden otros similares en Alemania, Italia, Dinamarca o Noruega. En cadena comienza entonces la suspensión de su administración, también en España. "Son muy pocos casos en el contexto de la vacunación global, pero pensamos que es prudente pararla cautelarmente", anunciaba María Jesús Lamas, directora de la Agencia Española del Medicamento.

La Organización Mundial de la Salud y la Agencia Europea del Medicamento dicen que no hay motivos para la suspensión y que la vacuna es segura. "De acuerdo con el conocimiento científico actual no hay evidencias que sustenten la restricción del uso de esta vacuna en ninguna población".

EL 25 de marzo se retoma la vacunación, pero ya no todos los países se suman. Dinamarca y Noruega se descuelgan y después se ha suspendido también en Países Bajos. Alemania comunica a finales de marzo 31 casos raros de trombosis y 9 fallecidos y decide ponerla solo a mayores de 60 años, aunque Merkel trata de infundir un mensaje de confianza.

También Mario Dragui o Boris Johnson se han vacunado con AstraZeneca. En Reino Unido se han comunicado siete fallecimientos en 18 millones de dosis administradas, pero en Alemania, Noruega o Países Bajos el porcentaje de casos es mayor del esperado.

Los síntomas sobre los que hay que estar alerta aparecen entre el día cuatro y el 20 tras la administración de la vacuna. Los casos aparecidos se han dado más en mujeres con edades entre 20 y 65 años, aunque la media es de 45 años.