Desde su infancia bilbaína, la afición a las pajaritas de papel estuvo presente en Unamuno. Así lo retrató Gutiérrez Solana, así hay cientos de fotos. Y así pasó a las siguientes generaciones.
Por eso, la Asociación de Amigos de Unamuno recién creada en Salamanca ha elegido como una de sus primeras actividades un taller de cuentos y papiroflexia para niños. De una forma tan divertida como ésta, aprenden a acercarse a una figura que, de momento, les queda un poco lejos
Una tarea la de crear un Unamuno para niños que, al contrario de lo que pueda parecer, no es tan complicada
Y eso que Unamuno tenía sus cosas. Por ejemplo, lo que todos llamamos papiroflexia, él lo llamaba Cocotología, utilizando el término francés cocotte para referirse a las pajaritas de papel.