El olor a humedad todavía se puede percibir en algunos de los hogares de la Colonia Botella. Esta zona fue la más afectada y todavía son visibles los daños. Algunas casas ya han vuelto a lucir como antes y otras se encuentran en proceso. Pero el dinero está saliendo del bolsillo de sus dueños.
 
Ya que al tratarse de segundas residencias la declaración como zona afectada gravemente por una emergencia no les permite acceder a subvenciones. Por su parte, desde el Ayuntamiento de las Navas del Marqués ya han solicitado el pago de cien mil euros que se dedicaron a contratar empresas que restableciesen los servicios esenciales. Respecto a los no esenciales.
 
Un año después también se ha intervenido en el cauce de los riachuelos, como el Arroyo El Corcho el causante de tanta destrucción aquella tarde de agosto.