ENTRE LAS VÍCTIMAS 10 EXTRANJEROS

Mueren 15 personas y 20 resultan heridas en un atentado en Marrakech

  • Entre las víctimas mortales hay cinco marroquíes y seis franceses
  • Mohamed VI ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas

Europa Press

A la espera de informaciones más concluyentes, al menos 15 personas habrían muerto y otras 20 habrían resultado heridas este jueves a raíz de una explosión en una cafetería del centro de Marrakech, según ha declarado la televisón estatal marroquí, que señalan ya la "tesis del atentado". Entre las víctimas mortales hay cinco marroquíes, seis franceses y otros cuatro extranjeros de nacionalidad no especificada.

El corazón turístico de Marruecos ha temblado este jueves a mediodía, como consecuencia de una explosión registrada en el café 'Argana' de Marrakech. Fuentes de Interior han detallado que, entre los fallecidos, hay cinco marroquíes, seis franceses (aunque Exteriores de Francia no ha podido confirmarlo) y otros cuatro extranjeros de nacionalidad no especificada. El diario galo 'Le Figaro' apunta a que hay, al menos, un británico.

El foco del atentado está situado en pleno centro de Marrakech, justo en la turística plaza Jaama Lafna. Entre las víctimas, además de personas de "diferentes nacionalidades", hay "clientes y empleados del café". Según un fotógrafo de la agencia de noticias Reuters, presente en el lugar, la explosión tuvo lugar en un momento en el que el local estaba abarrotado de gente. Como mínimo, hay 20 heridos.

'Acto criminal'

La agencia estatal de noticias de Marruecos (MAP), se ha hecho eco de un comunicado del Ministerio de Interior en el que se precisa que "los primeros datos recogidos en el lugar indican que se trata de un acto criminal". Además, la cartera informa de que ya "se ha abierto una investigación para determinar las circunstancias de la explosión".

Precisamente sobre este punto, fuentes oficiales barajan, a falta de datos oficiales, que el incidente pudo partir del incendio de varias bombonas de gas en el interior del establecimiento.

Una delegación del Gobierno marroquí, encabezada por Taieb Cherqaoui y Mohamed Taib Naciri, titulares de Interior y Justicia, se han desplazado al lugar de los hechos. Los acompañaban Saad Hassar, secretario de Estado de Interior, Cherki Drais, director general de Seguridad Nacional, y Marrakech-Tensif-Al Haouz, gobernador de la región, entre otros.

La comitiva ha visitado, además, el hospital Ibn Toufail, al que han sido trasladados los heridos. Mohamed VI, rey de Marruecos, ha emplazado a las carteras que encabezaban el grupo a promover una investigación e informar a la opinión pública "de las conclusiones" con "celeridad y transparencia", en aras de "la preservación de la tranquilidad y seguridad de personas y bienes".

El monarca, que ha presidido el Consejo de Ministros celebrado en el Palacio Real de Fez, también ha dado instrucciones al Ministerio de Sanidad para que proporcione "todos los cuidados médicos y el apoyo humano necesarios a los heridos", a los que ha deseado una "rápida recuperación". A las "afligidas" familias de las víctimas, les ha transmitido "paciencia y consuelo".

Horas después, Mohamed VI, ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas de la "agresión criminal" en una ciudad que es "símbolo de cohabitación entre religiones y civilizaciones". Este tipo de acciones es "contrario a los nobles valores humanos de respeto del derecho sagrado a la vida, de tolerancia, de libertad y de paz", y no afectará a la "determinación" de Marruecos para seguir siendo territorio "pacífico", de unión entre "pueblos y culturas".

El Rey ha añadido en su declaración, recogida por MAP, que los hechos reforzarán la "voluntad de los marroquíes" de seguir luchando por "la consagración del progreso democrático y en materia de desarrollo". Del mismo modo, el pueblo continuará trabajando "por la solidaridad con la comunidad internacional en la lucha contra toda forma de criminalidad, agresión y terrorismo".

Nicolas Sarkozy, presidente de Francia, ha denunciado "este acto odioso, cruel y cobarde que ha dejado numerosas víctimas, entre ellas franceses". Tras manifestar su "simpatía" y sus "más sinceras condolencias, tanto a las autoridades como al pueblo marroquí", el mandatario ha asegurado que su Gobierno, en coordinación con el marroquí, hará todo lo posible para garantizar "la asistencia necesaria" a los franceses que se encuentren ahora en Marrakech.