TECNOLOGÍA

La robótica al servicio de nuestros mayores

En 2050 habrá en España el doble de personas mayores de 65 años y esto crea una oportunidad de negocio en los cuidados

Lidia Corral

En 2050 habrá en España el doble de personas mayores de 65 años. Esto crea una oportunidad de negocio en los cuidados. Este miércoles en Valladolid la robótica social saca músculo como un eje de la nueva economía. El Clúster de Soluciones Innovadoras para la Vida Independiente (SIVI) ha organizado la Jornada Técnica Robótica Social y Asistencia. Entre los objetivos: dar una visión del estado del arte de la robótica para la vida independiente, identificar las barreras para su uso y facilitadores, ver oportunidades de mejorar de la calidad de vida de las personas y la oportunidad de desarrollo económico regional para un mercado global.

Desde el Parque Científico de la Universidad de Valladolid, casi una decena de empresas han acercado sus propuestas, por ejemplo la Fundación CARTIF nos presenta a Copito, un robot que vive con mayores en residencias. La robótica social acompaña y ayuda. "Nosotros queremos que la gente viva más tiempo y de manera independiente en casa, que es donde quiere estar", asegura Jorgina Díaz, directora Desarrollo de Negocio Robótica Alisys. Por eso son cada vez más personalizados: su propuesta cambia su rostro y habla idiomas. 

Desde el Instituto de Robótica para la Dependencia de Sitges traen un robot que acompaña a residentes, es interactivo e informa por ejemplo del menú del día a residentes.

Pero la robótica social también puede colaborar en la rehabilitación. Inrobics está especializada en aplicarlo en ejercicios, los profesionales incorporan sus rutinas al robot y este da los pasos para que los pacientes cumplan su tratamiento. Además una cámara comprueba que esté realizándose correctamente.

En esta línea trabajan también en Apapachoa. Proponen muñecos terapéuticos. Aparentemente parecen peluches convencionales pero en su interior guardan la electrónica que hace que "cobren vida". Están pensados para personas con demencia, con alzhéimer o niños con síndrome del espectro autista. Tienen un vibrador en su interior que hace que puedan incluso latir. Tienen determinados modos, positivos o negativos, que en función de cuál esté activo realizan unos sonidos. Se hacen a mano desde Béjar en colaboración con el Air Institute.

Y con realidad virtual se pueden preparar para la vida cotidiana. Cotesa trae un simulador de realidad virtual que puede conseguir entrenarnos. Hay ejercicios cognitivos, como realizar sumas con la cesta de la compra o recordar objetos en un orden determinado.

Y en ese día a día, Cartif también aterriza con un andador inteligente. Cuenta con motores en las ruedas que permiten asistir a la persona en su camino: ayudan a subir o frenan al bajar. También detecta si la persona se aleja y frena.

La tendencia demográfica actual puede suponer una oportunidad para Castilla y León. Nuestra comunidad ya trabaja en diferentes proyectos punteros. El reto es integrarlos de manera eficiente.