VALLADOLID

Villalón de Campos

VILLALONDECAMPOS

Villalón, cansado y fatigado entre el adobe de sus viviendas y la tierra mezclada con paja y barro que reviste sus paredes sobradamente centenarias. Villalón, mar inmenso de Castilla, casi siempre inabarcable como la infinitud del firmamento que permite divisar cualquier detalle, por mínimo que éste sea, hasta más allá del horizonte, cielo y tierra unidos por una línea casi siempre recta e invadido por la amplitud de su paisaje.

Paseos a cualquier hora del día por lugares entrañables y plenos de viejas remembranzas: la calle de la Rúa con sus soportales de siglos y sus casas de ladrillo, de piedra y de adobe. Ladrillo y barro, sobre todo el barro y su arquitectura, han logrado, al cobijo del tiempo, el premio de la eternidad.

Villalón fue asentamiento humano desde el neolítico como lo atestiguan los restos hallados, entre ellos una hacha plana de cobre del año 2500 antes de Cristo. Posteriormente, ha sido tierra de vacceos y se han hallado restos celtibéricos y cerámica romana y altomedieval.

Su origen pudo ser romano. Una prueba de ello serían los trozos de muralla que se conservaron y en los cuales se encontraron diferentes monedas de plata y cobre con el busto de los Césares. Algunos historiadores piensan que Villalón es la antigua población de Pelonquin o Parámica, citada ésta última por Ptolomeo.

Entre los monumentos de Villalón destacan: el Rollo Jurisdiccional y de Justicia de los Condes de Benavente, se alzó en 1523 por los artífices de la catedral de Burgos con la misma piedra que la seo burgalesa, es único en España en forma, dimensiones y detalles;  el Ayuntamiento de estilo Neobarroco, cuya fachada posee uno de los símbolos de Villalón, un escudo con una mano que empuña un alón azur;  La Quesera del autor Jesús Trapote Medina, homenaje a las tradicionales vendedoras de queso de la comarca; la Iglesia de San Miguel Arcángel de estilo gótico-mudéjar, que alberga el sepulcro del Canónigo Leonés Don Diego González del Barco, obra de Juan de Juni y uno de los más grandes y suntuosos órganos barrocos de la provincia; Casa del Corregidor y el Antiguo Hospital de la Vera Cruz, entre otros.

 La gastronomía típica de Villalón se encuadra en la propia de toda la Tierra de Campos.

Son recetas basadas en los productos de la tierra y tradicionalmente unidas a los ciclos de la naturaleza o a determinadas celebraciones festivas.