En esta balsa comenzará la primera actuación este mes de junio. Más de cien trabajadores de Tragsa, empresa adjudicataria, comenzarán la instalación de la tubería que llevará el agua a los sectores XVIII, XIX y XXI, los tres amarillos de este plano. El presupuesto de esta actuación es de siete millones de euros, y se espera que esté terminada en 2018.

En total, para 2021 se habrán transformado los regadíos para 20.000 hectáreas. Se empieza por el canal bajo por decisión del ministerio, que ha elegido los proyectos más recientes porque están actualizados y se aprovecha mejor la superficie regable.

El proyecto comenzaba hace 30 años, con la construcción del embalse de Riaño. El impulso definitivo ha llegado con la implicación de los regantes, que incluso propusieron adelantar dinero.

En 2021 deben estar concluidas las obras de 20.000 hectáreas, y comenzadas las de las otras 13.000, para terminarlas dos o tres años después. Será una forma de fijar población y generar empleos directos e indirectos que revitalicen los municipios afectados, 18 en León y cinco en Valladolid.