Día grande de las fiestas de Palencia. Y aunque el protagonista hoy es el patrón, San Antolín, la presencia de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, ha generado una gran expectación.

Un efusivo recibimiento que se ha prolongado hasta su llegada a las puertas de la catedral, donde ha podido escuchar el himno de la provincia.

En la catedral apenas cabía un alma. Nadie quería perderse este momento: El de recoger y beber el agua de la Cripta de San Antolín, al que la leyenda atribuye propiedades curativas.

Este año la ausencia de obispo ha obligado al administrador diocesano a conducir la misa en honor del patrón.

Éste es el acto central de las fiestas, el que tiene un carácter eminentemente religioso. Pero hay que recordar que hasta el sábado, los palentinos podrán seguir disfrutando de conciertos, teatro y el resto de espectáculos programados.

Solo queda que el tiempo acompañe y no arruine lo que queda de las fiestas de San Antolín.