Ultiman los detalles para otra jornada de entrenamiento: troncos, hachas, piedras de arrastre y bolas de alzada son algunas de sus herramientas. Se preparan para participar en el pentatlón vasco del deporte rural, aunque todos son de Castilla y León. Comenzaron animándose unos a otros y ahora también hacen exhibiciones allí donde les llaman: "Tenemos amigos en el País Vasco que dicen cómo coger las piedras", indica el levantador David Herrero. 

El esfuerzo es máximo en cada ejercicio porque las pruebas son muy exigentes. "Las que cortan no pueden con el peso de la piedra y nos da miedo el hacha a las que levantamos", nos cuenta Julia. Ella es un caso especial, muy pocas mujeres participan en esta disciplina y destaca que ha sido complicado conseguir ser un grupo para hacer un pentatlón femenino. 

Moratones y callos son las consecuencias más visibles de mantener vivos estos deportes tradicionales que cada vez atraen a más castellanos y leoneses dispuestos a golpear con fuerza en el pentatlón vasco.