José Antonio Rodríguez Vega, más conocido como el ‘Mataviejas’ o el ‘violador de la moto’ fue condenado en el año 1991 a más de 400 años de prisión por violar y asesinar a al menos 16 ancianas entre el año 1987 y 1988.
De la condena, finalmente cumpliría 30 años, sin embargo, a tan solo 6 años de salir en libertad, fue asesinado en la prisión salmantina de Topas por otros dos reclusos. Rodríguez Vega se vanagloriaba del dinero que iba a hacer al salir de prisión por la venta de sus memorias, algo que finalmente le impidieron aquellos con los que compartía patio.
José Antonio Rodríguez Vega es lo que los expertos describen como un psicópata de libro. Completamente integrado en la sociedad, cometía sus crímenes en el momento en que se ganaba la confianza de sus víctimas, mujeres de entre 60 y 100 años.
Comenzó su carrera criminal violando a ancianas, algo que le costo 25 años de cárcel de los cuales solo cumplió 8, gracias a que muchas de sus víctimas se apiadaron del joven. Sin embargo, cuando salió de prisión, Rodríguez Vega no volvería a cometer el ‘error’ de dejar a sus víctimas con vida, por lo que pasó de ser el ‘violador de la moto’ como hasta el momento se le conocía, al ‘Mataviejas’.
Frío, calculador, metódico y muy fetichista, este psicópata guardaba recuerdos de sus víctimas en una habitación de su casa. Gracias a estos objetos, se le pudo involucrar en el crimen de otras ancianas cuyos casos se encontraban sin resolver.